Público asistente a una de las actividades realizadas en el marco del I Simposio de Mineralogía y Paleontología de Utrillas. Antonio Fontenla
El I Simposio de Paleontología de Utrillas enseña a los aficionados a catalogar fósiles
Escudero muestra cómo clasificar unos bienes protegidos que no se deben recolectar
Los aficionados a la paleontología de Utrillas tuvieron este viernes la oportunidad de aprender a clasificar los fósiles a través de una charla que, impartida por el paleontólogo y licenciado en Ciencias de la Tierra, Juan Carlos Escudero, mostró el proceso tanto de obtención del fósil en el campo como del posterior análisis en el laboratorio de cara a su clasificación. La actividad se enmarca en el I Simposio de Paleontología, Minerología y Geología Aplicada con Contribución a la Agenda 2030 y sus Objetivos de Desarrollo Sostenible, que se prolongará hasta el lunes 22 de julio.
El experto especificó que los fósiles son un bien protegido que pertenece al patrimonio nacional de España y aseguró que la ley prohibe su recogida. Detalló que tienen una protección similar a los elementos arqueológicos y planteó la necesidad de evitar su expolio, además de recalcar que recoger un fósil supone un grave daño puesto que, si no lo realiza un experto, supone una importante pérdida de información al eliminarse el contexto.
El primer paso de los expertos para recolectar un fósil es contar con herramientas adecuadas para la extracción y determinar la localización exacta, algo fundamental para conocer los estratos y ver qué asociación de fósiles se pueden encontrar.
En este sentido, planteó que los expertos ya saben, en función del tipo de estratos que hay en una determinada zona, qué fósiles se van a encontrar: “Si son carbonatos o calizas, en el 90% de los casos serán fósiles oceánicos, tanto de plataformas como de mayores profundidades”, especificó Juan Carlos Escudero en la charla que impartió en Utrillas.
El paleontólogo habló también de las técnicas de laboratorio, una vez recolectado y tomados los apuntes tanto de los estratos como de las asociaciones de diferentes fósiles. En el laboratorio se emplean técnicas de barrido o estudio a nivel microscópico y macroscópico y se realiza una tomografía computerizada, que sirve para tener las imágenes de los fósiles en 3D, de forma que proporciona una visión interna sin necesidad de romperlos.
Todos esos datos ayudan a la identificación y dotación y para ello es vital comparar la muestra recogida con otros fósiles y colecciones, así como con bases de datos de bienes ya catalogados. “Esas guías de identificación incluyen descripciones, que resultan muy útiles para acotar la datación”, especificó el ponente.
Habló a su vez de los fósiles guías, que son aquellos que ayudan a la dotación cronológica y deben cumplir determinadas características, como tener una distribución amplia por todo el mundo y que su evolución haya sido muy rápida e igual su extinción, “con eso sabemos que ese fósil no ha existido antes ni después”.
A lo largo de la charla describió algunos de los avances en los últimos años, como las herramientas informáticas y los modelos en 3D, que “están revolucionando el campo de la paleontología”, dijo.
Las actividades, que incluyen una exposición con más de 150 fósiles y paneles informativos, así como diversas charlas, continuarán a lo largo del fin de semana y hasta el lunes, cuando concluirá el simposio.
El experto especificó que los fósiles son un bien protegido que pertenece al patrimonio nacional de España y aseguró que la ley prohibe su recogida. Detalló que tienen una protección similar a los elementos arqueológicos y planteó la necesidad de evitar su expolio, además de recalcar que recoger un fósil supone un grave daño puesto que, si no lo realiza un experto, supone una importante pérdida de información al eliminarse el contexto.
El primer paso de los expertos para recolectar un fósil es contar con herramientas adecuadas para la extracción y determinar la localización exacta, algo fundamental para conocer los estratos y ver qué asociación de fósiles se pueden encontrar.
En este sentido, planteó que los expertos ya saben, en función del tipo de estratos que hay en una determinada zona, qué fósiles se van a encontrar: “Si son carbonatos o calizas, en el 90% de los casos serán fósiles oceánicos, tanto de plataformas como de mayores profundidades”, especificó Juan Carlos Escudero en la charla que impartió en Utrillas.
El paleontólogo habló también de las técnicas de laboratorio, una vez recolectado y tomados los apuntes tanto de los estratos como de las asociaciones de diferentes fósiles. En el laboratorio se emplean técnicas de barrido o estudio a nivel microscópico y macroscópico y se realiza una tomografía computerizada, que sirve para tener las imágenes de los fósiles en 3D, de forma que proporciona una visión interna sin necesidad de romperlos.
Todos esos datos ayudan a la identificación y dotación y para ello es vital comparar la muestra recogida con otros fósiles y colecciones, así como con bases de datos de bienes ya catalogados. “Esas guías de identificación incluyen descripciones, que resultan muy útiles para acotar la datación”, especificó el ponente.
Habló a su vez de los fósiles guías, que son aquellos que ayudan a la dotación cronológica y deben cumplir determinadas características, como tener una distribución amplia por todo el mundo y que su evolución haya sido muy rápida e igual su extinción, “con eso sabemos que ese fósil no ha existido antes ni después”.
A lo largo de la charla describió algunos de los avances en los últimos años, como las herramientas informáticas y los modelos en 3D, que “están revolucionando el campo de la paleontología”, dijo.
Las actividades, que incluyen una exposición con más de 150 fósiles y paneles informativos, así como diversas charlas, continuarán a lo largo del fin de semana y hasta el lunes, cuando concluirá el simposio.