Síguenos
El harmonium de La Cuba vuelve a sonar por Santa Brígida El harmonium de La Cuba vuelve a sonar por Santa Brígida
Alumnos del aula de Adultos de La Cuba, con Isabel, la de mayor edad, en primer plano

El harmonium de La Cuba vuelve a sonar por Santa Brígida

Los alumnos del Aula de Adultos visitan la iglesia
banner click 236 banner 236

El harmonium de la iglesia de La Cuba volvió a sonar por Santa Brígida, la fiesta de invierno que celebraron los vecinos de la localidad el pasado sábado, gracias a los alumnos de la CPEPA Hermanas Catalán de Ocón del aulario de La Cuba. 

En la localidad de La Cuba, la CPEPA Hermanas Catalán de Ocón imparte a los alumnos clases de Inglés, Informática, Memoria y Conoce donde vives, a las que acuden regularmente entre cuatro y siete alumnos. 

Recientemente, en la asignatura Conoce donde vives, los alumnos visitaron la iglesia con su profesor, Raúl Sirvent, una visita que dio mucho de sí por todo lo que han trabajado a partir de ella. 

En el templo los vecinos de la localidad conservan un harmonium, un instrumento musical de origen alemán que se popularizó porque no era tan caro cómo el órgano, ya que no utilizaba tubos, pero cuyo sonido era similar. Al parecer el harmonium de La Cuba es un modelo francés, fabricado en Barcelona y comercializado por la marca R. Maristany, que data de finales del siglo XIX o principios del siglo XX. A decir del profesor “casi siempre se justifica que no los quemaban por si con el instrumento podían hacer baile en la iglesia”.

Aprovechando sus amplios conocimientos musicales, el profesor Sirvent tocó la misa de Angelis, y una de las alumnas más mayores, Isabel, de 84 años, se emocionó y contó que esa pieza la cantaban su padre y su tío y un señor que tocaba el piano. Aprovechando las circunstancias Raúl  Sirvent decidió tratar de recuperar antiguos cantos que se oficiaban con el harmonium y, de esta manera ponerlo en valor. 

Así, durante la última temporada los alumnos de la clase de Memoria han aprendido la letra del  Kyrie de la misa de Angelis,  mientras que, en Conoce donde vives, han trabajado temas relacionados con la música, el harmonium, la liturgia del canto, la importancia de la iglesia como aporte de cultura, etc. Como Isabel, la alumna más longeva, comentó que la misa de Ángelis la cantaban en las celebraciones festivas, aprovecharon la cercanía de la fiesta de Santa Brígida para recuperarla, cosa que sucedió este pasado sábado ante la alegría de los vecinos por recuperar el patrimonio de la localidad. 

Pero aun han trabajado más temas en clase. En la asignatura Conoce donde vives, que desde principio de curso ha tenido gran aceptación entre los vecinos, partiendo de la arquitectura de la iglesia y lo que conserva, han aprendido sobre la estructura de las iglesias de planta de salón, la peculiaridad de las portadas del siglo XVIII, las pinturas murales y también sobre las criptas y los cementerios. Sirvent explicó en clase por qué se enterraba a los difuntos dentro de las iglesias o en cementerios anejos,  y como a partir de finales del XVIII, a través de una Real Pragmática, se invita a las autoridades locales a trasladar los cementerios a las afueras. 

Con el estudio de estos temas otro alumno, Paco,  recordó que cuando hicieron el depósito del agua en el lugar donde estaba el antiguo cementerio de la parroquia,  encontraron varios platos rotos que se conservaron en el Ayuntamiento junto con una estela funeraria, por lo que supusieron que los platos eran donde el sacerdote ponía los santos óleos para administrar la extrema unción y que, como ya no se podían utilizar por haber tenido el óleo los enterraban con los difuntos, tal vez un poco siguiendo la tradición precristiana del ajuar.

De esta manera, a partir del patrimonio que todavía conserva la localidad, y de los pocos vestigios que han quedado, los alumnos aprenden cultura general y local, apreciando más su pasado para poder transmitirlo a los jóvenes.