El geriátrico El Sabinar de Terriente usa un exoesqueleto para reducir el esfuerzo físico de su personal

La Residencia de mayores El Sabinar del Río, ubicada en la localidad de Terriente, apuesta por la innovación tecnológica con la incorporación de un exoesqueleto para mejorar la salud de su personal. Es pionera en la incorporación de esta nueva tecnología, diseñada para asistir físicamente en tareas exigentes, como el levantamiento de personas o el transporte de objetos pesados, busca mejorar la salud y reducir el cansancio de las gerocultoras, quienes se enfrentan a importantes esfuerzos físicos en sus labores cotidianas.

Se trata de una de las primeras residencias de ancianos en Aragón en incorporar este tipo de tecnología avanzada en su plantilla de trabajo. El director del centro, Ignacio Tobar, destacó este “enfoque vanguardista en la mejora de las condiciones laborales”. El responsable del centro incidió en que el cuidado de los mayores “requiere un esfuerzo físico constante” y por eso han apostado por la incorporación del exoesqueleto para “dotar a las trabajadoras de “todas las herramientas necesarias para proteger su salud y bienestar”.

El exoesqueleto, una estructura ligera y flexible, permite a las trabajadoras reducir el esfuerzo físico en las tareas más exigentes, minimizando el riesgo de lesiones musculares y fatiga crónica. Esta tecnología, cuya eficacia se ha demostrado en sectores industriales y sanitarios, tiene un impacto directo en la calidad del servicio que se brinda a los residentes, ya que el personal podrá realizar sus tareas con mayor seguridad y menos desgaste físico. “Este avance tecnológico no solo mejora la calidad de vida del personal, sino también la atención que reciben nuestros residentes. Al contar con un equipo más saludable y descansado, nuestros mayores disfrutan de un cuidado más eficiente y cercano,” añade el director.