Cantavieja se acerca a sus masías con una muestra que hace un repaso por casi todas

Los porches de la plaza del Ayuntamiento de Cantavieja acogen una exposición fotográfica que incluye prácticamente todas las masías que hay en el término municipal. Los autores de la muestra son el arquitecto técnico y aficionado a la fotografía Jesús Ángel Gómez y la arquitecta Silvia Gómez Pacheco, que han realizado un recorrido por todas las construcciones con el fin de catalogarlas.

Están los mases de las cuatro partidas que hay en Cantavieja, La Umbría, La Vega, El Barranco y La Solana. Cada una de ellas tenía una ermita y un santo en cuyo honor celebraban una fiesta anual. En este sentido Silvia Gómez, que realizó su Trabajo de Fin de Grado (TFG) sobre las masías de Cantavieja, señala que pese a que vivían alejados unos de otros tenían una unión mucha mayor que la existente actualmente entre numerosos habitantes de los pueblos.

En total hay 105 mases que se han plasmado en diez lonas impresas, dos por cada una de las partidas del término municipal, otra que sirve de introducción y una más con la información obtenida del Instituto Geodésico Nacional, a cuyos mapas acudieron los investigadores para localizar algunas de las masadas. En este sentido, Jesús Ángel Gómez matiza que han recabado información incluso de la cartografía de principios del siglo XX, realizada por un geógrafo que recorrió todo el territorio cartografiándolo.

Jesús Ángel Gómez es un gran aficionado a la fotografía muy vinculado a Cantavieja que tenía una completa colección de imágenes sobre mases. Cuando la concejala de Cultura del Ayuntamiento de Cantavieja, Marta Monforte, le propuso hacer una exposición sobre el tema, recorrió de nuevo todas las edificaciones y amplió su ruta con otras de las que le iban hablando. Sin embargo, lamenta que aún faltan en torno a media docena, como le han asegurado algunos vecinos al ver la exposición. Por eso, Gómez no descarta en ampliar el trabajo, contando de nuevo con Silvia Gómez, que es su hija, con el fin de recopilar material fotográfico de todas ellas. Además, quiere desarrollar aún más el trabajo incluyendo las fuentes y otros hitos agrícolas que en esta investigación primera no abordaron.

En cuanto al estado de conservación, matiza que es muy dispar entre las que se siguen utilizando y aquellas en las que solo se trabajan las tierras. Así, aunque los ganaderos van todos los días a la explotación, sea propia o arrendada, si no utilizan la vivienda en ocasiones dejan de atenderla.  “Algunas sí mantienen los tejados pero en otras en cuanto se daña un madero del tejado a la edificación le quedan días”, alerta Jesús Ángel Gómez.

La exposición, que estará hasta el puente de la Constitución en los arcos de la plaza del Ayuntamiento de Cantavieja, ha supuesto el descubrimiento de muchas masías para numerosos de los vecinos. “El mayor logro de la muestra ha sido que había vecinos que son de toda la vida del pueblo y no las conocían”, relata el autor.

En este sentido, la concejala Marta Monforte comenta que las generaciones más jóvenes de la localidad no saben ni el nombre ni la ubicación de muchos de estos mases, por eso creyó conveniente impulsar un trabajo de este tipo. “Todos sabemos dónde está Tailandia, pero no el Masico de la Liebre”, dice a modo de ejemplo.

La muestra ha despertado tanto interés en la localidad que el Ayuntamiento ha decidido editar un catálogo que incluya todas las imágenes.