Cantavieja celebra por todo lo alto el patrón de los animales

Los caballos fueron los absolutos protagonistas de la fiesta de San Antonio este fin de semana en Cantavieja, que volvió a celebrar al patrón protector de los animales domésticos, tan importantes en la economía agrícola y ganadera de la zona, y una fiesta muy querida por los vecinos.

La fiesta empezó a primera hora, con la recepción de los caballos que, respondiendo al llamamiento de los mayorales, llegaron desde  Benicarló y de la propia localidad. 

Los caballos de tiro de Benicarló arrastraron arboles hasta la plaza para después poder preparar la hoguera que iba a arder al anochecer. Esta actividad fue la novedad de la jornada y contó con mucha participación de curiosos que se acercaron a la plaza  a ver el arrastre y montaje. 

Los actos de la tarde comenzaron alrededor de las seis, cuando los niños disfrutaron de paseos en carro tirado por los caballos de arrastre de Benicarló en reata por las calles de la localidad y, posteriormente, se encendió la hoguera y comenzó la bendición de animales, a la que concurrió todo el vecindario para pasar por el hisopo a sus animales más queridos: muchos perros, conejos, pájaros, caballos e incluso algún ternero. Los mayorales de la fiesta ofrecen a todos los que pasan por la bendición el tradicional bollete, o pan de San Antonio, y un vasito de vino para combatir el frío.

La jornada terminó con la cena popular en el pabellón, en la que participaron alrededor más de trescientas personas, que pudieron disfrutar de entremeses, olla del Maestrazgo, carne, tarta y dulces, además de divertirse con la actuación estelar de Chica Caramelo una show woman que hizo reir a carcajadas al público con su música,  bromas  y sarcasmo. La noche finalizó con orquesta y discomóvil.

La mañana del domingo se celebró la tranza a la salida de misa en la puerta de la iglesia, en la que se subastaron productos aportados por vecinos y mayorales y que contribuyen a sufragar la fiesta.