Avanza el proyecto piloto para transformar la lana de ovejas de Montes Universales en pellet

El Centro de Referencia en Gestión Ambiental-CPIFP San Blas, la Comunidad de Albarracín y la Fundación de Desarrollo de la Comunidad de Albarracín han firmado el acuerdo que regulará la colaboración para implementar el proyecto piloto de valorización de la lana de oveja de los Montes Universales en el que también participa la Universidad de Zaragoza.

El acuerdo contempla la transformación de la lana de oveja  en un pellet con valor agronómico que será utilizado en ensayos experimentales en el CPIFP San Blas, tanto en cámara de germinación como en invernadero y posteriormente aplicado en varias parcelas de experimentación del propio centro, con el fin de obtener resultados concluyentes extrapolables a diferentes terrenos y cultivos.

Con el proyecto de innovación, se pretende dar solución al problema actual que supone la acumulación de lana tras el esquileo forzoso previo a la cunícula, considerado este producto como residuo tipo 3 con restricciones impuestas para su almacenamiento y movilidad. Las alternativas de descontaminación o eliminación disponibles hasta ahora son inviables desde el punto de vista económico o ambiental por las externalidades negativas referentes a la huella de carbono, residuos y vertidos generados en distintos procesos.

Aplicación

El proyecto se basa en la aplicación agronómica del subproducto de lana que comenzará con la pelletización del mismo en las instalaciones habilitadas por la Comunidad de Albarracín en Tramacastilla con la maquinaria específica adquirida por la Fundación de Desarrollo. Una vez pelletizado, el subproducto se trasladará al CPIFP San Blas, donde será usado mediante el diseño experimental planteado.

El plazo para el desarrollo del proyecto es de 24 meses a partir de la firma del acuerdo. En la primera fase de la experimentación, se analizarán las características agronómicas del sustrato producido, centrándonos en la mejora de las propiedades orgánicas, la retención hídrica y la aireación del suelo, la reducción de la evaporación y la prevención de la asfixia radicular, pudiendo obtener resultados concluyentes sobre la viabilidad en campo del sustrato pelletizado.

La proximidad entre la lana generada, la planta de pelletización y la aplicación experimental del proyecto permite minimizar la huella de carbono en la revalorización de un subproducto convirtiéndose en un ejemplo viable de economía circular.