Aliaga pagará 50.000 euros por el castillo en vez de hacer la permuta que tenía prevista

El Ayuntamiento de Aliaga ha sacado a licitación por un procedimiento negociado la compra del Castillo de Aliaga por un importe de 50.000 euros. Se trata de la cuantía que han acordado con el propietario, Santiago Dalmau, después de que no se haya podido realizar la permuta que se barajaba en un inicio.

El alcalde, Sergio Uche, explicó que la intención del equipo de gobierno era recibir la propiedad de la fortaleza a cambio de una finca rústica del Ayuntamiento, pero al iniciar el proceso se dieron cuenta de que estaba catalogada como Monte Público porque se modificó hace unos años. Aunque era posible recuperar la propiedad para hacer la cesión al dueño del castillo, el procedimiento se iba a alargar en el tiempo, algo que Uche no quiere.

Todo ello ha motivado que, finalmente, el consistorio abone al titular la cuantía de 50.000 euros, un precio al que se ha llegado tras negociar con los propietarios, que pedían un importe mucho mayor por el recinto fortificado.

Acto público

El Ayuntamiento ha realizado una modificación presupuestaria para hacer frente al pago del castillo, que realizará con fondos propios. “Preferíamos permutar para no hacer desembolso, pero el expediente era muy largo y queremos que la firma sea cuanto antes”, detalló el alcalde, quien añadió que se hará un acto abierto a todos los vecinos, porque el castillo es un elemento muy emblemático para Aliaga y, además, este año se cumplen 50 años desde su venta, que fue en 1972.

La firma de la venta pondrá fin a varios años de búsqueda de los propietarios y posterior negociación, puesto que la fortaleza se vendió en una subasta pública en el año 1972 y el comprador, Martín Dalmau, padre del actual dueño, ni tenía relación alguna con el pueblo ni realizó ninguna intervención en el recinto, cuyo estado es cada vez más ruinoso. El castillo era propiedad del Estado que en esos años se desprendió de muchas propiedades con un elevado valor patrimonial. En el caso de la fortaleza de Aliaga, partió en la subasta por un precio de 1.500 pesetas y se adjudicó por 120.500 (724 euros).

La fortaleza fue la sede principal de la Orden del Hospital en la provincia de Teruel y estuvo habitada de forma continuada hasta las guerras carlistas, cuando fue bombardeada y abandonada. Los arqueólogos creen que el subsuelo esconde una vasta información sobre la historia de la localidad en época medieval y moderna. El monumento, que ocupa unos 4.500 metros cuadrados y es uno de los más grandes del territorio turolense, no ha sido objeto de ninguna intervención arqueológica.

El primer paso, una vez sea propiedad del Ayuntamiento, será la realización de actuaciones de emergencia en uno de los paños de muralla que hay junto a una de las torres, puesto que se está desprendiendo y supone una amenaza, según detalló el alcalde.

Su siguiente paso, avanzó, será elaborar el plan director para marcar las pautas a seguir a la hora de realizar una consolidación y rehabilitación de los restos. El alcalde comentó que ya están en contactos con el Gobierno de Aragón para que les ayude a financiar este plan director y después intentarán obtener ayudas para las actuaciones arqueológicas y la restauración a través del 1,5% Cultural del Ministerio de Fomento.