Alfambra mira con orgullo a su pasado medieval con la orden de Montegaudio

La celebración desde hace 14 años de la Encomienda de Alfambra ha servido para despertar entre los vecinos el interés por su pasado medieval, centrado en la fundación en 1173 por Rodrigo Álvarez, tercer Conde de Sarria, de la Orden de Santa María de Montegaudio, a la que el rey de Aragón Alfonso II El Casto cedió el castillo de la localidad. La fiesta vive su día más grande con el nombramiento del nuevo comendador, Borja Fabre, que tuvo lugar por primera vez en la iglesia de la Asunción.
La implicación de los alfambrinos con la Encomienda llevó a la constitución hace apenas tres meses de la asociación cultural Montegaudio, presidida por Enrique Gonzalvo, que se encargará de coordinar a los 19 grupos participantes en la organización de la fiesta y de velar por el rigor histórico de la misma.
Gonzalvo indicó que la recreación ha crecido mucho desde su primera edición, celebrada en 2004, y que en la actualidad congrega a unas 400 personas repartidas en 19 jaimas. Por este motivo, se vieron en la necesidad de constituir a principios de este año una asociación que sirviera para aglutinar y coordinar a todos los participantes, de repartir las tareas de montaje y de velar por el rigor histórico de la fiesta, tanto en la vestimenta como en el menaje. “Queremos ser el nexo de unión entre el Ayuntamiento, la comisión de fiestas y los diferentes grupos y asociaciones, como las de jubilados y amas de casa, que toman parte en la Encomienda”, señaló.
En este sentido, han pedido a las 19 jaimas un estudio histórico que justifique su presencia en la Alfambra del siglo XII, y que también servirá para que todos conozcan el pasado medieval de la localidad. Gonzalvo añadió que la asociación impulsará la restauración de la estructura original del Castillo de la orden, para lo que ya se cuenta con un plan director que fue presentado el sábado, 24 de marzo.
Las amas de casa  han sido las encargadas de elaborar las migas que almorzaron todos aquellos que después participaron en el desfile por las calles de Alfambra. La presidenta de la asociación, Marina Martín, explicó que habían utilizado para su elaboración 20 barras de pan de kilo, 7 litros de aceite, doce docenas de huevos, 3,6 kilos de panceta, 10 longanizas y 2 chorizos.
El desfile estuvo marcado por las fuertes rachas de viento. Fue precisamente este fenómeno meteorológico el que llevó a aplazar la representación  de la leyenda La enterrada viva al mediodía del domingo. Así lo explicó el alcalde de Alfambra, Francisco Abril, que se congratuló de la consolidacion de la Encomienda gracias a la implicación de todos los vecinos.
Uno de ellos es Borja Fabre, motivo por el que  fue nombrado Comendador 2018 en un acto celebrado por primera vez en la iglesia parroquial, que se llenó de gente. Visiblemente emocionado e ilusionado, agradeció el reconocimiento a su trabajo en favor de la fiesta.