Valdealgorfa exige regadíos y precios justos para garantizar el futuro de la agricultura

La Feria agrícola de la Almendra de Valdealgorfa volvió a ser este sábado foro de opinión y de reivindicaciones, coincidiendo con las movilizaciones que protagoniza desde hace unas semanas el campo español. La localidad bajoaragonesa se convirtió en la voz de quienes exigen unos precios dignos para los productos agrícolas, especialmente para el fruto seco que protagoniza el certamen, que este año ha registrado  mínimos históricos, pero también de quienes esperan desde hace años el regadío para la margen derecha del Ebro. Y todo con un objetivo: que ésta no sea la última generación que se dedica al olivar y al almendro en la Tierra Baja turolense.

En voz del sector se erigieron la alcaldesa de Valdealgorfa y anfitriona, Reyes Gimeno, y el presidente de la Comarca del Bajo Aragón, José Miguel Celma.

La primera manifestó su respaldo al sector cediendo el testigo del acto inaugural a los niños del pueblo que, con pequeños tractores de juguete, fueron el centro de atención antes de que se procediera al corte de cinta. “Confiamos en que toda la problemática que tiene el sector del campo ahora mismo se solucione, y eso pasa por escuchar a los agricultores y atender sus demandas”, enfatizó la regidora.

“Abogamos por un consumo nacional de productos agrícolas, y en relación a la almendra, todos sabemos la fuerte competencia que ejerce la almendra californiana con la española, cuando la nuestra, la nacional, es de muchísima mayor calidad, y la calidad del producto se tiene que pagar”, reclamó Reyes Gimeno.

Modernización de plantaciones

La modernización de plantaciones y la puesta en regadío de las tierras situadas en la margen derecha del Ebro fueron otras reivindicaciones que se escucharon en esta jornada de sábado. En este caso, fue el presidente de la Comarca del Bajo Aragón quien se encargó de poner de manifiesto que “en el Ebro, desde Tudela hacia abajo no se aprovecha ni una gota de agua, cuando el riego es fundamental para la supervivencia del sector”, enfatizó José Miguel Celma.

El presidente de la institución comarcal puso de manifiesto la falta de inversiones que se han llevado a cabo en Aragón en la margen derecha del Ebro, a diferencia de lo que ocurre con la izquierda, lo que ha “generado un agravio comparativo para toda la agricultura de la provincia de Teruel”, algo que calificó como “injusto”, además de “un mal endémico que sigue sin resolverse”.

José Miguel Celma recordó que “hace menos de un mes” se reunió con el consejero de Agricultura, Ganadería y Alimentación del Gobierno de Aragón, Ángel Samper, para darle a conocer “los proyectos de regadío que siguen pendientes en la Tierra Baja turolense, algunos de ellos históricos, como son los riegos del Mezquín, que vienen desde los años 50 del siglo XX”. Según Celma, en ese encuentro, que tildó de “satisfactorio”, la delegación bajoaragonesa planteó la necesidad de llevar a cabo “la elevación de aguas del Ebro a Andorra, la elevación a Samper de Calanda, el aprovechamiento de los 8 hectómetros cúbicos del Guadalope a los que Endesa todavía no ha renunciado, a pesar de haber cerrado la central térmica, los riegos del Mezquín y la elevación a Las Ventas de Valdealgorfa, que permitiría regar todo el Matarraña”.

El presidente comarcal recordó que “la elevación de aguas a Andorra se encuentra a una cota 700 u 800, y con unas balsas intermedias la elevación a Las Ventas de Valdealgorfa no sería ninguna barbaridad”. Sobre la primera actuación, insistió en que “su ejecución permitiría poner en riego 40.000 hectáreas” que ahora son secanos.

Por otra parte, señaló que “actualmente nos encontramos en el sector agrario con unos derechos históricos de la PAC que, en algunos casos, están beneficiando a personas que son propietarios de tierras, pero que no se están dedicando a la tierra, y eso está creando trabas para que los jóvenes se incorporen al campo”. De la misma manera, insistió en que “ante unas parcelas tan diseminadas como tenemos, se hace muy necesario acometer concentraciones parcelarias y poner en riego unas tierras que actualmente está trabajando la que puede ser la última generación que se dedica al campo”. Será así, dijo Celma, “si no se pone remedio con medidas que hagan atractivo el sector para los jóvenes”.

35 expositores

El certamen acoge este fin de semana (se clausurará mañana por la tarde) en el pabellón polideportivo a 35 expositores, 18 de ellos relacionados directamente con el sector de los frutos secos. La alcaldesa manifestó que “Valdealgorfa siempre ha sido una localidad hospitalaria y acogeremos este fin de semana con los brazos abiertos a aquel que quiera visitarnos”. En el recinto ferial, donde se ha ocupado todo el espacio disponible, el visitante encontrará desde puestos de venta de flores, productores de almendra, representantes de empresas descascaradoras, empresas de venta de pistachos y maquinaria agrícola de diverso tipo, pequeña y grande, además de una exposición de tractores de segunda mano.

Entre los aperos de labranza destacan los que ha expuesto el empresario local Pedro Nicolás, que por primera vez muestra en el pabellón rulos preparados específicamente para trabajar las cubiertas vegetales, una forma diferente de concebir de agricultura frente al laboreo que está tomando cada vez más fuerza en todo el país. No en vano, las cubiertas vegetales forman parte de las alternativas que están aceptadas en los nuevos ecorregímenes de la Política Agraria Común (PAC). Precisamente ayer por la tarde, el pabellón polideportivo acogió una charla sobre las cubiertas vegetales en los leñosos, que corrió a cargo de Carlos Molina, asesor técnico de la Asociación Aragonesa de Agricultura de Conservación (Agracon).