Un año de jardinería y albañilería para embellecer el origen de la Val de Zafán
El Inaem concede un taller de empleo para ocho personas al Ayuntamiento de La Puebla de HíjarA la cuarta ha ido la vencida y el Ayuntamiento de La Puebla de Híjar ha conseguido un taller de empleo para acondicionar, mediante trabajos de jardinería y albañilería, el tramo municipal de la Val de Zafán.
La Vía Verde transcurre por el antiguo trazado del ferrocarril, con origen en la estación de La Puebla de Híjar y final en Tortosa (Tarragona), donde el turismo asociado a la práctica del senderismo y el ciclismo está muy extendido y constituye un importante nicho de riqueza y empleo.
La pretensión de La Puebla no es que 50.000 personas pasen cada año por el Kilómetro 0, como sí ocurre en el tramo catalán, pero el Ayuntamiento quiere dar pequeños pasos para dinamizar una modalidad de turismo sostenible por la que apuesta.
Con este propósito, el taller de empleo complementará actuaciones anteriores como la puesta en valor de los 18 kilómetros que discurren entre La Puebla y Samper de Calanda que llevó a cabo el grupo Leader Adibama hace tres años. Además, una subvención del programa de parados de larga duración del Inaem permitió mejorar muros durante cuatro meses, la Comarca del Bajo Martín colaboró con la señalización y la Diputación Provincial de Teruel acondicionó un tramo.
Ahora, el Consistorio ha recibido 153.000 euros del Inaem (Gobierno de Aragón) para contratar durante todo un año a ocho alumnos-trabajadores a partir de mediados de febrero. El Ayuntamiento complementará la dotación económica con 25.000 euros. Con el montante total se pagarán los sueldos de los operarios y el de dos docentes. Uno de ellos hará las veces de director y administrativo.
“Lo prioritario va a ser nuestro tramo de Vía Verde, 2,5 kilómetros desde la estación hasta el túnel” donde el camino llega a término de Samper, explicó el alcalde de La Puebla de Híjar, Pedro Bello.
En concreto, se sujetarán muros; se ajardinarán taludes con especies autóctonas resistentes a la sequía, previa protección con malla anti hierba; se construirán pequeñas obras de fábrica o madera a lo largo del trazado para vallados delimitadores y de protección; y se instalarán elementos ornamentales y turísticos.
El alcalde indicó que podría instalarse alguna fuente y que las labores de jardinería también llegarán a zonas verdes del casco urbano.
Todo ello incrementará el valor paisajístico (cambio del impacto visual de la antigua vía del ferrocarril por una senda de carácter rural), ecológico (el uso fundamental será la práctica del ciclismo y senderismo) y social (reclamo para vecinos y visitantes) de la Vía Verde.
Bello tratará también de que por la Val de Zafán pasen los menos vehículos motorizados para que sea exclusiva y que senderistas y ciclistas puedan realizar una práctica deportiva segura. Para ello, piensa en acondicionar un camino rural paralelo que usen los vehículos agrícolas.
Unidad en Aragón
Bello instó a los municipios turolenses de la Vía Verde a permanecer “unidos” y trabajar en común para que la infraestructura pueda ser un motor turístico complementario.
En este sentido, recordó la reunión que hace unos meses tuvo lugar en Cretas y que aglutinó a administraciones, empresas y expertos. “La idea era empezar a trabajar en común las dos Comunidades Autónomas, Cataluña y Aragón. Los catalanes en esto nos llevan ventaja”, confesó el regidor poblano.
Bello puso el acento en enlazar los tramos de Samper y Valdealgorfa, para lo que Alcañiz debería acondicionar su tramo. La falta de continuidad capa las posibilidades de desarrollo de la Vía Verde, o Camino Natural como pretende el Ayuntamiento de Alcañiz para compatibilizar el uso deportivo con el paso de vehículos agrícolas.
“Debemos adaptar el Fondo de Inversiones de Teruel o buscar subvenciones europeas y poner la Vía Verde como un pimpollo en dos o tres años” porque “no son demasiados kilómetros”, instó el alcalde poblano.
Titulación
El taller de empleo permitirá la formación en jardinería y albañilería a ocho alumnos que aprenderán ambas especialidades.
Obtendrán una titulación que les permitirá trabajar como peones agrícolas, de horticultura, jardinería y vivero; y como peones de construcción.
El aprendizaje en jardinería les llevará 330 horas, por 160 de albañilería. Además, recibirán conocimientos en sensibilización ambiental, prevención de riesgos laborales, alfabetización informática y sensibilización en la igualdad de oportunidades. En total, 590 horas, de las que más de la mitad serán prácticas.
En jardinería aprenderán operaciones básicas en viveros e instalación y mantenimiento de parques y jardines. En albañilería se formarán en labores auxiliares de obra, pastas y morteros, y obras de fábrica para revestir.
El alcalde se mostró ilusionado por poder dar trabajo durante un año a parados de larga duración.