Se elevan a diez los cuerpos hallados en la fosa común del cementerio de Alcañiz

La fosa común del cementerio de Alcañiz encontrada el miércoles de la semana pasada por el equipo que dirigen los arqueólogos Javier Ruiz y Nacho Piedrafita contiene restos de al menos diez personas. La excavación de los primeros cuerpos tras el hallazgo ha permitido detectar en los últimos días al menos tres cráneos más en la zanja.

Los arqueólogos seguirán esta semana con los trabajos en la fosa, que tiene unos siete metros de largo por uno de ancho. El grupo calcula que podrán realizar la exhumación hasta hoy miércoles, mientras que el resto de la semana la dedicarán a prospectar los dos sondeos que han realizado en otras partes del cementerio donde se cree que también hubo fosas comunes.

El equipo de trabajo continúa retirando tierra y cal de entre los restos óseos, los exhumará y colocará numerados en sus cajas correspondientes para proceder, en el futuro y si hay financiación, a su identificación. 

Con la retirada de los huesos que se aprecian ahora mismo en la zanja se podrá comprobar si aparecen más debajo. No en vano, la mayor parte de los cuerpos -salvo uno que se encuentra en uno de los bordes de la linea de enterramiento- están superpuestos unos sobre otros y a dos de los 10 individuos que se aprecian en la fosa solo se les ve el cráneo. El resto del cuerpo está debajo de otros cuerpos.

En cuanto se proceda a la exhumación de los cuerpos que están encima se podrán excavar los dos cuerpos que están semiocultos y comprobar si aparecen huesos de alguna otra persona. No obstante, “no es probable que aparezcan más, porque incluso de dos sólo se les ve el cráneo, pero cuando levantemos los tres que hay en el centro de la fosa excavaremos por si acaso”, detalló Ruiz.

Al haberse ampliado el número de cuerpos -se ha pasado de los siete iniciales a 10- las hipótesis de trabajo del equipo de Ruiz y Piedrafita son ahora varias. “Estamos barajando todo tipo de premisas, desde que esta ‘saca’ -se denomina así a la extracción de grupos de presos de las cárceles para fusilarlos- no quedara registrada en la documentación del juzgado o del cementerio o que sólo registraran documentalmente a una parte de los asesinados y al resto no”, algo que parece que debió de ser habitual.

Hay que recordar que nada más encontrar la fosa la semana pasada se vieron restos correspondientes a siete cuerpos y que en la documentación publicada por el historiador José María Maldonado sólo consta un fusilamiento en grupo de siete personas. En este sentido, se barajó tener en cuenta como hipótesis de trabajo que los restos correspondieran a las personas ejecutadas en mayo de 1940, tal y como consta en la investigación del historiador alcañizano.

Todo abierto

Sin embargo, con tres cuerpos más, “todo está abierto”, añadió el director de la excavación: En cualquier caso, Javier Ruiz da por descartado casi por completo que este grupo fuera fusilado en distintos momentos. “Está claro que los que fueron asesinados aquí lo fueron en un mismo momento, porque no hay subdivisiones dentro de la fosa, hay cuerpos mezclados. Se ve que tiraron aquí dentro a 10 personas - los cuerpos aparecen en distintas posiciones- , echaron la cal y taparon. Si fueran asesinados en distintos momentos y hubieran dejado la zanja abierta, lo cual no es previsible y sería muchísima sorpresa, no estarían superpuestos como aparecen”, añadió.

Según Ruiz, “o hay una saca de 10 personas que no está controlada o sólo registraron los nombres de algunos de ellos”, y añadió: “esperamos que el ADN de familias que han acudido a identificarse como familiares nos termine aclarando quiénes pueden ser”. 

Por otra parte, en este lugar fueron enterrados “los republicanos, según dicen los que cuentan algo”, apuntó el arqueólogo, quien, no obstante, recordó que a unos metros de distancia “hay tres cruces de que se corresponden a fusilados por España”, es decir, tres personas asesinadas por los anarquistas en 1936. “Ahora mismo es muy complicado afirmar o descartar nada”, según el codirector de la excavación, ya que “la memoria también se elabora, puesto que muy poca gente se acordaba que había una cruz de madera en otra zona del cementerio en la que levantaron unos niños hace unos años y ahora que hemos encontrado imágenes de allí, la gente se va acordando”. 

El historiador José María Maldonado consideró poco probable que no sean fusilados por el Franquismo. “En el 36 la manera de proceder era distinta, no había sacas, ni grupos de 10 o de siete, sino que eran asesinatos de una o dos personas que encontraban en cualquier calle y las mataban. En mi opinión, estos no son del principio de la guerra”. Maldonado coincidió en la interpretación de que “o es una saca no documentada o una en la que no se registró a todos los fusilados”.

Lo que parece estar claro es que “son civiles”. Aparte de dos proyectiles de bala han aparecido entre los restos piezas que corresponden a cinturones, hebillas o botones de las camisas. No hay ningún efecto militar. Al realizar la exhumación es previsible que “salgan más restos, que pueden dar alguna pista más”.

A partir de ahora, los investigadores buscarán financiación para realizar el estudio antropológico de los cuerpos, ver si son de hombres o mujeres, si se puede conocer la causa de la muerte y hacer el análisis de ADN para identificar los restos de estas 10 personas”. Entre tanto, también se inicia una investigación documental en los archivos de los tribunales militares de la época, un trabajo arduo, porque “sólo de Alcañiz hubo más de 1.000 juicios militares”, según puso de manifiesto Javier Ruiz. En definitiva: “estamos en el principio del proceso, y todo son hipótesis, algunas se confirmarán y otras no”, añadió.