Participativa y colorida ofrenda a la Virgen de Pueyos en el día grande de Alcañiz

Multitudinaria ofrenda a la Virgen de Pueyos en Alcañiz, que el sábado por la mañana vivió su ‘Día grande’ de las Fiestas honrando a su patrona con centenares de flores que fueron depositadas para vestir el manto de la Virgen. La imagen presidió la celebración religiosa de la mañana, oficiada por el párroco de Alcañiz Juan Estevan, acompañado de Jesús Jaime, quien fuera párroco durante años en esta parroquia y que en los últimos años no ha faltado a la celebración del día de la patrona de la ciudad.

La de este sábado  en Alcañiz fue una romería muy concurrida, según reconocieron los miembros de la Quinta del 77, que este año se ha encargado de que el Santuario estuviera limpio y preparado para recibir a los devotos. Quizá, señalaban sus miembros, el hecho de que el día de Pueyos haya coincidido en sábado ha ayudado a que la ofrenda floral se alargara más de lo previsto, hasta pasadas las 10 de la mañana.

Pero concurrida fue también la procesión que se inició en la plaza de España y que se desplazó hasta el Santuario. “Hemos visto muchísima participación, como nunca, algo que nos ha sorprendido gratamente”, valoró Luis Navarro, secretario de la Junta de los Quintos del 77, que, junto con el resto de miembros, se encargaba de que la procesión y la ofrenda discurrieran según lo previsto y en orden.

El recorrido desde la plaza, en el que participaron la Corporación, las Reinas y la Comparsa de Gigantes y Cabezudos, llegó al Santuario pasadas las 09.15 de la mañana, momento en el que se inició la ofrenda de flores a la patrona, que se prolongó durante algo más de una hora. En orden y siguiendo una fila que estaba flanqueada a derecha e izquierda por decenas de personas que esperaban el inicio de la Eucaristía, los oferentes avanzaron hasta depositar los ramos a los pies de la patrona. Parejas y familias al completo, muchas de ellas con niños de corta edad y vestidos con el traje regional, eran mayoría entre quienes pacientemente esperaban a que les tocara el turno. Cerró la ofrenda el grupo de la Asociación El Cachirulo, cuya rondalla se encargó de amenizar esta mañana de fiesta en la capital del Bajo Aragón.

Tras la celebración del acto religioso, los alcañizanos se dispersaron por los alrededores del Santuario de Pueyos, colocándose a resguardo del sol, al amparo de las sombras del pinar y buscando la comodidad de las hamacas para celebrar el tradicional almuerzo matutino.

Los actos de la mañana discurrieron según lo previsto, tal y como explicaron los responsables de la Quinta del 77. La Junta lleva semanas preparando la explanada y el Santuario para que estuvieran limpios para la celebración. El viernes por la tarde “nos encargamos de preparar las zonas de aparcamientos, los espacios verdes y el comedor del edificio, además de realizar una limpieza general”, detalló Luis Navarro. También el viernes “se sacó a la Virgen de la ermita vieja  y se la trasladó a la iglesia del Santuario, se limpió la imagen y se dejó preparada para que hoy estuviera en perfectas condiciones para la celebración religiosa”, añadió. La Junta, ya el sábado por la mañana, extrajo la imagen de la iglesia y la colocó en la explanada, detrás del altar.

Según explicó Navarro, una de las acciones que han realizado los Quintos del 77 -entre hombres y mujeres son 192 personas- este año es la reparación del tejado de la ermita vieja.