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Las piscinas de Oliete y la quesería Los Santanales reciben su marca de calidad Las piscinas de Oliete y la quesería Los Santanales reciben su marca de calidad
Estrella y Pilar Navarro (centro) recogerán el testigo de sus padres, Luisa Puig, izquierda, y Pedro Navarro, derecha, en Los Santanales

Las piscinas de Oliete y la quesería Los Santanales reciben su marca de calidad

NorteTeruel acredita productos y servicios distinguidos
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El restaurante Las Piscinas de Oliete y la quesería Los Santanales de Ejulve son los nuevos establecimientos a los que la junta directiva de Adibama ha concedido la acreditación de la marca de Calidad Rural norteTeruel.

Además, el comité de gestión y control de la marca ha aprobado la renovación al restaurante La Ánfora de Andorra, el restaurante Avenida de Albalate del Arzobispo y la casa de turismo rural La Ojinegra de Alloza.

El pasado viernes, el gerente de Adibama, José Vicente Querol, hizo entrega de la placa acreditativa a Mari Luz Soriano y David Garcés, gestores de Las Piscinas de Oliete.

De esta forma, la marca Calidad Rural norteTeruel, que parte de una estrategia de desarrollo territorial de los grupos Leader impulsada desde Adibama desde hace una década, sigue creciendo y cada vez son más los que forman parte de este pequeño club de excelencia basado en la calidad de los productos y servicios que ofrecen. Todos ellos se caracterizan por hacer territorio.

Poner en valor

“Queremos poner en valor su compromiso con el futuro de las comarcas del Bajo Martín y Andorra-Sierra de Arcos”, destacó Querol, quien recordó que disponen de cartas específicas con criterios propios para el sector turístico, agroalimentario, balnearios, centros de estudios locales, museos y empresas de turismo activo. “Implica un trabajo previo laborioso, es una empresa externa la que hace el proceso de acompañamiento para que la empresa interesada alcance las condiciones mínimas para tener la marca, y se hacen propuestas de mejora”, explicó el responsable.

Adibama entiende la marca como un instrumento para alcanzar la excelencia empresarial, pero también de promoción de la empresa y el territorio. “Si da un buen servicio o tiene un buen producto, redunda en beneficio de todo el territorio”, explicó.  Es el caso del restaurante de Oliete, cuyos gestores abrieron en verano de 2021, en plena pandemia, y hoy dan servicios con 80 menús diarios, contratando a siete personas en invierno y once en la campaña de verano en un pueblo de poco más de 300 habitantes. “Es un premio a nuestro trabajo, al desarrollo de nuestra propuesta gastronómica, y un reconocimiento de lo que nos ha costado poner en funcionamiento el local desde cero, porque tuvimos que hacer una reforma integral de un centro social. Estamos muy agradecidos a Adibama por la subvención que nos concedieron”, valoró Soriano.

Buen servicio

“Desde el principio se interesaron por tener un buen establecimiento, dar un buen servicio y vincularse con el territorio. Dan información de toda la oferta turística de la zona y un servicio esmerado pero informal. Trabajan con producto local y tienen responsabilidad social corporativa para mantener a los trabajadores”, detalló Querol. En cuanto a la quesería Los Santanales de Ejulve, el gerente de Adibama destacó el relevo generacional que garantiza el interés de Pilar y Estrella Navarro por continuar con el proyecto familiar, y más este año en el que han tenido que adaptarse al cierre de la vaquería de Alcorisa, que les suministraba un porcentaje importante de leche. Ahora hacen un producto cien por cien de cabra.

“Queremos apoyar especialmente proyectos donde de por medio esté el relevo generacional porque corremos el riesgo de que en pocos años nos quedemos con escasamente la mitad de las empresas que tenemos en este momento”, advirtió Querol.

En este sentido, disponer de una marca de calidad reconocida abre puertas a estos negocios luchadores. “Es un instrumento para mejorar la gestión empresarial y promocionarse como empresa”, subrayó el responsable.

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