Las obras del castillo de Valderrobres se centran ya en el paso de ronda
El acceso a la parte más elevada de la residencia arzobispal estará habilitado en julioEl castillo de Valderrobres lleva tres meses en obras. Son los trabajos que se corresponden con las fases I y II del proyecto de restauración que promueve la Fundación Valderrobres Patrimonial. En este momento, las obras se centran en la delimitación del patio de armas y en la adecuación del paso de ronda que permitirá el acceso del público a los torreones almenados. Este trabajo podría estar acabado en julio para que, en plena temporada veraniega, los turistas puedan accederá a la parte más elevada de la fortaleza y disfrutar de unas magníficas vistas del paisaje fluvial de Valderrobres.
Estas dos primeras fases tienen más trabajo de herrería que de albañilería y afectarán más a cuestiones de seguridad que de reconstrucción. No obstante, también incluyen la mejora de los accesos, que prácticamente está acabada.
Según explicó el director de la Fundación, Manuel Siurana, “se está trabajando en la delimitación de accesos al castillo, en la colocación de barandillas en la explanada exterior, de puertas, etc, es decir, se está haciendo un trabajo en todo el perímetro para que nadie corra peligro cuando vaya de visita”. Hay que recordar que hace unos años un niño se cayó desde la explanada a una de las calles inferiores “y no queremos que algo así vuelva a suceder”, añadió Siurana. Las barandillas formarán “un enrejado” en lugar de ser barrotes verticales.
Igualmente, se ha colocado una puerta de hierro en la parte trasera del castillo para evitar que accedan vehículos a la explanada principal de la que fue residencia arzobispal, según informó el director de la Fundación.
En relación a los trabajos que se llevan a cabo en el exterior, prácticamente están terminados. El arquitecto redactor del proyecto, Luis Moreno, detalló cómo se han introducido algunos cambios importantes en la escalinata principal que comunica con la explanada del castillo. La rampa que había desde la calle Buen Aire, en la que se producían mucho resbalones, ha sido sustituida por “un escalonado más rápido con piedra arenisca de la zona de Alcañiz”. También se ha impermeabilizado y extendido repelente para evitar el crecimiento de la vegetación.
Igualmente, “hemos protegido los desniveles que había en algunos tramos y hecho una nueva barandilla que da continuidad” al entorno. Además, han realizado una reparación en un tramo situado entre la iglesia y el castillo donde se producían filtraciones de agua. “Esa zona se ha nivelado y se ha repuesto la piedra original, y donde estaba más deteriorada se ha sustituido”, añadió Moreno.
Las obras se centran ahora en el paso de ronda, donde se ha llevado a cabo una limpieza general. Se ha retirado la vegetación que crecía entre los resquicios de las piedras, se ha retejado la cubierta y llevado a cabo una reparación superficial. “Lo que se ha hecho es sustituir las tejas rotas o que estaban sueltas”, añadió.
Almenas
La Fundación Valderrobres Patrimonial quiere “habilitar esa zona para su uso turístico”. En este sentido, el proyecto de adecuación “pretende que “el paso de ronda permita una circulación que sea lo más cómoda posible, porque tenemos ahí elementos de piedra a modo de chimenea que sobresalen”. Según Moreno, “si lo consideramos necesario, ampliaremos el paso de ronda para que la gente pueda acceder a los torreones que rematan las esquinas del castillo y que tienen un almenado desde el que hay unas vistas impresionantes”, dijo el arquitecto. Así, está prevista la reposición de losas de piedra para que el tránsito sea lo más cómodo posible. No en vano, Moreno apuntó que “la zona de las almenas es uno de los espacios más atractivos para el visitante”.
Por su parte, el director de la Fundación Valderrobres Patrimonial manifestó que el deseo de los promotores es que el paso de ronda esté terminado para empezar la temporada de verano y aprovechar así la masiva afluencia de visitantes que acuden a la capital del Matarraña. El arquitecto, sin embargo, no fue tan optimista: “estamos en ello, pero posiblemente no estará terminado hasta mediados de julio”. No obstante, “inmediatamente se podrá habilitar para la visita”.
Lo que queda por delante son las fases III, IV y V, que tienen una subvención del 1,5% cultural del Gobierno de España concedida por un montante de 491.000 euros. Es el 50% de lo que cuesta la obra. El 50% restante lo aportará la Fundación.
El arquitecto redactor ultima el proyecto de las dos últimas fases, que “se tiene que presentar al ministerio de Fomento en agosto. En cuanto nos den su visto bueno, podremos licitar las obras”, afirmó el director de la Fundación.