La variante de Alcorisa entra en servicio después de una inversión superior a los 45 millones de euros

El Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana (Mitma) pone este viernes en servicio la variante de Alcorisa en la carretera N-211, en la provincia de Teruel, tras invertir 45,13 millones, lo que permitirá que más de 3.000 vehículos dejen de transitar por el centro de la población.

Además, los usuarios de la carretera N-211 se ahorrarán más de 6 minutos en sus trayectos al evitar el paso por el municipio y tendrán mayor confort y seguridad al evitar las intersecciones de la travesía con las calles de la localidad.

El objetivo, ha destacado este viernes el Mitma, es mejorar la seguridad vial y el bienestar de sus habitantes, además de contribuir al aprovechamiento de los ciudadanos de la zona, favoreciendo a su vez el uso de medios de transporte sostenibles, como la bicicleta, y promoviendo estilos de vida más saludables y respetuosos con el medio ambiente.

Esta variante, que tiene una longitud de 6,8 kilómetros y se encuentra en la carretera N-211 entre sus kilómetros 208,400 y 214,500, puede ponerse en servicio gracias a la orden de continuidad provisional de las obras, autorizada en septiembre de 2022 por la ministra, Raquel Sánchez, incluidas en el modificado número dos de estas obras y que ha sido aprobado recientemente por el Consejo de Ministros.

Concluidas las obras en la travesía, a partir de ahora está prevista la puesta en marcha de los trabajos ya anunciados el pasado año con la formalización del contrato de conservación integral TE-03 y que contarán con una inversión de 824.598 euros para la construcción de una glorieta en el kilómetro 212,900 de la N-211, en su intersección con las carreteras A-223 y A-225, con el fin de mejorar la seguridad vial en este cruce y regular el tráfico de entrada a Alcorisa.

Por otro lado, el próximo año se llevará a cabo la rehabilitación del firme de la travesía de Alcorisa, con el objetivo de una puesta a punto para la nueva configuración del tráfico en la zona, donde el tráfico de largo recorrido, sobre todo los vehículos pesados, ya no circularán por la misma.