La resaca del 28A: la cuenca minera castigó al PP, aunque no elevó en demasía a Pedro Sánchez
Los populares se desploman en beneficio de Ciudadanos, que toma el liderazgo de la derechaLos municipios de la cuenca minera turolense que han dejado de extraer carbón desde primeros de año y verán cerrada la central térmica de Andorra el 30 de junio de 2020 han confiado al PSOE la llamada transición justa que ha de llenar de oportunidades económicas y laborales los polígonos industriales. No obstante, el crecimiento de la formación de Pedro Sánchez es menor (14,9%) en estas localidades que en el global de la provincia (29,3%), si bien el PP ha pasado a ser cuarta fuerza política en Andorra, superado por Ciudadanos e incluso por Unidas Podemos.
El repetido mensaje que ha abanderado el PP de que la culpa del cierre de la central térmica la tienen las políticas ecologistas del primer mandato de diez meses de Sánchez no ha calado en la cuenca minera, que tiene presente que los incumplimientos del anterior Plan Miner 2013-2018 y la falta de regulación del mercado eléctrico fueron herencia de los conservadores.
Ello, unido a la tendencia general de la fragmentación del electorado de derechas y al crecimiento de Cs, ha desencadenado que en la cuenca minera turolense –si se toman como referencia los tres municipios donde hasta enero se seguía extrayendo carbón (Ariño, Estercuel y Foz Calanda) y Andorra, donde por poco tiempo se quemará el lignito que queda– el PP haya protagonizado un desplome histórico.
El PP se deja en estos municipios casi 600 votos, pasando de los 1.337 que en coalición con el PAR sacó en 2016 a los 756 actuales. Representa una caída del 43,5%, ligeramente superior a la que ha experimentado el partido de Pablo Casado a nivel provincial (41,1%).
Por contra, el PSOE pasa de 1.623 sufragios a 1.865, consolidándose como partido más votado en estos municipios, que tradicionalmente han sido un bastión de la izquierda y concretamente de la opción socialista. No obstante, tampoco arrasa y deja abierta la vía de que la derecha en conjunto tome protagonismo.
Ciudadanos pasa a ser la opción preferida para el electorado de derechas en estos territorios, que sitúan al partido de Albert Ribera en la segunda posición –aunque a mucha diferencia del PSOE– con 895 papeletas (en 2016 obtuvieron 577).
Cabe destacar que, aunque pierden apoyos, Unidas Podemos no se descalabran tanto como en otros territorios de Teruel y se sitúan como tercera fuerza. Bajan, eso sí, de 1.077 a 797 votos, lo que supone un 26% menos (en la provincia se han dejado el 34,4%).
Vox irrumpe con fuerza, colocándose como quinta fuerza política en estos pueblos gracias a los 485 votos obtenidos. Con su aportación, la derecha se sitúa en 2.136 votos, frente a los 2.420 de las dos opciones de izquierda.
De 1.681 a 629 votos en 8 años
En Andorra, donde la participación ha pasado del 68% al 74,4%, el PSOE ha incrementado sus votos de 1.340 a 1530. Le siguen a gran distancia Cs, con 771 sufragios (517 en 2016), Unidas Podemos (de 955 a 714) y el PP (de 1.094 a 629). El batacazo de los populares en Andorra es monumental en la serie histórica más reciente, pues en 2011 llegó a tener 1.681 apoyos (el 40,5%) y el pasado domingo tan solo atrapó el 15%. Más de mil votos perdidos en ocho años.
En Ariño, que ha sido el pueblo más carbonero de España en el último lustro, el PSOE ha ganado de calle con el 44,6% de los votos, seguido a mucha distancia de Cs (20,1%) y el PP (14,9%). Unidas Podemos y Vox han empatado con el 9,2% de la representatividad para cada uno.
El apoyo al PSOE ha sido aún más intenso en Estercuel con un 46,8%, seguido de Unidas Podemos (19,9%) y del PP (17%). Cs obtiene allí el 8,5% de las papeletas y Vox el 6,4%. Por último, en Foz Calanda el PSOE gana con claridad con el 41,1%, seguido en esta ocasión del PP (24,7%), Ciudadanos (12,7%), Vox (12%) y Unidas Podemos (8,2%).