Lectura del manifiesto y actuación de Les Morenillas este jueves en el Mausoleo de los Amantes
La provincia reivindica el rosa como un movimiento para impulsar la investigación sobre cáncer de mama
Las turolenses participan en mayor medida que el resto de aragonesas en los cribados El rosa es más que un color. Bajo ese lema la provincia de Teruel reivindicó este 19 de octubre, Día Mundial contra el Cáncer de Mama, mayor investigación para los casos complejos de este tipo de cáncer. Se desarrollaron en cerca de una veintena de municipios turolenses para poner de manifiesto que las mujeres de la provincia están concienciadas con la prevención, como demuestra que el 84,5% de las turolenses en el rango de edad establecido -entre 50 y 69 años- participó en el Programa de Detección Precoz de Cáncer entre octubre de 2022 y septiembre de 2023. Este dato es superior a la media aragonesa, que se sitúa en un 74%.
El de mama es el tumor más frecuente en mujeres. Según los datos facilitados por la AECC en Teruel, un centenar de mujeres fueron diagnosticadas de este cáncer en la provincia en 2022 con una prevalencia de 406, en su totalidad mujeres. Gracias a la investigación, a la prevención y detección precoz, la mortalidad por esta enfermedad ha disminuido de una forma significativa: en los últimos años se ha logrado aumentar la supervivencia media del cáncer de mama a 5 años al 85%. A pesar de este incremento de la supervivencia aún queda mucho por hacer y por eso, desde la asociación quisieron recuperar el origen movilizador del color rosa con el lema elegido este año.
El presidente de la AECC en la provincia, Miguel Ángel Sauras, destacó la importancia de participar en las campañas de cribado porque “es importantísimo conseguir detectar el tumor en fases iniciales”, afirmó en el acto que se celebró ante la puerta del ayuntamiento de la capital, en cuyo balcón se instaló un gran lazo rosa en presencia de las autoridades locales y provinciales que quisieron acompañar a la asociación en este día.
La alcaldesa, Emma Buj, animó a todas las mujeres a participar en programas de cribado dada la importancia de que la enfermedad se detecte en fases iniciales porque el resultado es notablemente más satisfactorio. Para Buj, el 19 de octubre es un día para reivindicar más fondos en la investigación de la enfermedad pero también para estar al lado de las mujeres que han sufrido y que sufren la enfermedad.
Tras la colocación del lazo rosa en el balcón del ayuntamiento de Teruel, se leyó el manifiesto El rosa es más que un color en el Mausoleo de los Amantes, en un emotivo acto acompañado de la música de Les Morenillas.
Durante esta jornada las estatuas y monumentos más emblemáticos de la capital y de otros municipios de la provincia lucieron una pulsera o lazo rosa simbólico contra el cáncer de mama y también se colocaron mesas informativas en el Centro de Teruel y en diferentes pueblos turolenses en las que se repartieron lazos rosas a los ciudadanos.
Los actos se replicaron por toda la provincia. Sarrión, Utrillas, Alcorisa, Andorra, Alcañiz, Calamocha, Muniesa, Valbona, Mora de Rubielos, Rubielos de Mora, Perales de Alfambra, Alfambra, Calanda, Cuevas Labradas, Alacón, Gea de Albarracín, Albarracín y Burbáguena entre otros municipios desarrollaron actos en la jornada de este jueves mientras en Sarrión se realizó una carrera solidaria este pasado sábado con la participación de 300 personas.
Bajo el lema El rosa es más que un color, la AECC recordó así la necesidad de mantener al movimiento social en el centro de su acción. El rosa ha sido un color históricamente relacionado con el sexo femenino, por eso, en los años 70, las mujeres con cáncer de mama lo adoptaron como símbolo de la lucha contra esta enfermedad. Detrás del color rosa también están las necesidades sociales y emocionales de todas las mujeres con cáncer de mama, así como todos los servicios gratuitos que presta la Asociación a las diagnosticadas. La AECC atiende a nivel nacional a más de un tercio de mujeres con cáncer de mama.
Soraya López Cañada tiene 34 años y el pasado 5 de abril le detectaron un cáncer de mama triple negativo. “Tengo el cáncer de mama más agresivo de todos”, afirmó este 19 de octubre a las puertas del Ayuntamiento de Teruel con motivo del Día Mundial Contra el Cáncer de Mama, una jornada en la que ella quiso reivindicar “más investigación”, porque puso el ejemplo de su caso: “Tengo el tumor más agresivo pero justamente es el que menos se ha investigado”.
No obstante, los avances realizados hasta el momento le han permitido ser beneficiaria de inmuterapia que “se ha demostrado que en el tipo de cáncer que tengo está dando buenos resultados”. Eso le hace “seguir en la brecha” con la esperanza puesta en que la quimio de la próxima semana sea la última. Después quedará una operación y mucho camino por delante pero se mostró dispuesta a recorrerlo.
“Mi pequeño fue el que me descubrió el tumor”, contó recordando cómo se inició esta carrera de fondo. “Le estaba dando el biberón a mi hijo de nueve meses y me dio un golpecito en la axila con su puñito, me dolió y a raíz de eso me exploré y me encontré un bultito en los ganglios, entonces fui a que me hicieran una mamografía y una ecografía y entonces lo supusimos”.
“Todo fue muy rápido”, recuerda, porque el 25 de marzo se lo descubrió y un mes más tarde ya tenía todas las pruebas hechas y estaba recibiendo su primera quimio.
La inmuterapia no está al alcance de todos los pacientes por ello Soraya pidió apoyo para la sanidad pública y la investigación. “Sin tratamientos efectivos no hay vida”, dijo y recordó que una de cada ocho mujeres van a pasar por un cáncer de mama en algún momento de su vida. También destacó la importancia de ir al médico en cuanto se detecta. “En mi caso mi hermana me insistió en que fuera al médico”, recordó.
Al acto en la plaza de la Catedral para colocar el lazo rosa del Día Mundial contra el Cáncer de Mama también acudió Lucía. Vive en una pueblo de la provincia y desde hace diez años está en tratamiento con más de un centenar de sesiones de quimio. En su caso está considerado una enfermedad crónica.
Lucía destacó que colabora con la AECC en Teruel y la apoya porque “nos ayudan psicológicamente, hacen actividades, promocionan el deporte y es una ayuda para el paciente, porque muchas veces te sientes solo y no sabes donde acudir”, comentó.
Como ella otras pacientes que están pasando o han pasado esta enfermedad quisieron hacer visibles sus casos en esta jornada para reivindicar que el rosa es más que un color.
El de mama es el tumor más frecuente en mujeres. Según los datos facilitados por la AECC en Teruel, un centenar de mujeres fueron diagnosticadas de este cáncer en la provincia en 2022 con una prevalencia de 406, en su totalidad mujeres. Gracias a la investigación, a la prevención y detección precoz, la mortalidad por esta enfermedad ha disminuido de una forma significativa: en los últimos años se ha logrado aumentar la supervivencia media del cáncer de mama a 5 años al 85%. A pesar de este incremento de la supervivencia aún queda mucho por hacer y por eso, desde la asociación quisieron recuperar el origen movilizador del color rosa con el lema elegido este año.
El presidente de la AECC en la provincia, Miguel Ángel Sauras, destacó la importancia de participar en las campañas de cribado porque “es importantísimo conseguir detectar el tumor en fases iniciales”, afirmó en el acto que se celebró ante la puerta del ayuntamiento de la capital, en cuyo balcón se instaló un gran lazo rosa en presencia de las autoridades locales y provinciales que quisieron acompañar a la asociación en este día.
La alcaldesa, Emma Buj, animó a todas las mujeres a participar en programas de cribado dada la importancia de que la enfermedad se detecte en fases iniciales porque el resultado es notablemente más satisfactorio. Para Buj, el 19 de octubre es un día para reivindicar más fondos en la investigación de la enfermedad pero también para estar al lado de las mujeres que han sufrido y que sufren la enfermedad.
Tras la colocación del lazo rosa en el balcón del ayuntamiento de Teruel, se leyó el manifiesto El rosa es más que un color en el Mausoleo de los Amantes, en un emotivo acto acompañado de la música de Les Morenillas.
Durante esta jornada las estatuas y monumentos más emblemáticos de la capital y de otros municipios de la provincia lucieron una pulsera o lazo rosa simbólico contra el cáncer de mama y también se colocaron mesas informativas en el Centro de Teruel y en diferentes pueblos turolenses en las que se repartieron lazos rosas a los ciudadanos.
Por toda la provincia
Los actos se replicaron por toda la provincia. Sarrión, Utrillas, Alcorisa, Andorra, Alcañiz, Calamocha, Muniesa, Valbona, Mora de Rubielos, Rubielos de Mora, Perales de Alfambra, Alfambra, Calanda, Cuevas Labradas, Alacón, Gea de Albarracín, Albarracín y Burbáguena entre otros municipios desarrollaron actos en la jornada de este jueves mientras en Sarrión se realizó una carrera solidaria este pasado sábado con la participación de 300 personas.
Bajo el lema El rosa es más que un color, la AECC recordó así la necesidad de mantener al movimiento social en el centro de su acción. El rosa ha sido un color históricamente relacionado con el sexo femenino, por eso, en los años 70, las mujeres con cáncer de mama lo adoptaron como símbolo de la lucha contra esta enfermedad. Detrás del color rosa también están las necesidades sociales y emocionales de todas las mujeres con cáncer de mama, así como todos los servicios gratuitos que presta la Asociación a las diagnosticadas. La AECC atiende a nivel nacional a más de un tercio de mujeres con cáncer de mama.
"Mi pequeño fue el que me descubrió el tumor"
Soraya López Cañada tiene 34 años y el pasado 5 de abril le detectaron un cáncer de mama triple negativo. “Tengo el cáncer de mama más agresivo de todos”, afirmó este 19 de octubre a las puertas del Ayuntamiento de Teruel con motivo del Día Mundial Contra el Cáncer de Mama, una jornada en la que ella quiso reivindicar “más investigación”, porque puso el ejemplo de su caso: “Tengo el tumor más agresivo pero justamente es el que menos se ha investigado”.
No obstante, los avances realizados hasta el momento le han permitido ser beneficiaria de inmuterapia que “se ha demostrado que en el tipo de cáncer que tengo está dando buenos resultados”. Eso le hace “seguir en la brecha” con la esperanza puesta en que la quimio de la próxima semana sea la última. Después quedará una operación y mucho camino por delante pero se mostró dispuesta a recorrerlo.
“Mi pequeño fue el que me descubrió el tumor”, contó recordando cómo se inició esta carrera de fondo. “Le estaba dando el biberón a mi hijo de nueve meses y me dio un golpecito en la axila con su puñito, me dolió y a raíz de eso me exploré y me encontré un bultito en los ganglios, entonces fui a que me hicieran una mamografía y una ecografía y entonces lo supusimos”.
“Todo fue muy rápido”, recuerda, porque el 25 de marzo se lo descubrió y un mes más tarde ya tenía todas las pruebas hechas y estaba recibiendo su primera quimio.
La inmuterapia no está al alcance de todos los pacientes por ello Soraya pidió apoyo para la sanidad pública y la investigación. “Sin tratamientos efectivos no hay vida”, dijo y recordó que una de cada ocho mujeres van a pasar por un cáncer de mama en algún momento de su vida. También destacó la importancia de ir al médico en cuanto se detecta. “En mi caso mi hermana me insistió en que fuera al médico”, recordó.
Al acto en la plaza de la Catedral para colocar el lazo rosa del Día Mundial contra el Cáncer de Mama también acudió Lucía. Vive en una pueblo de la provincia y desde hace diez años está en tratamiento con más de un centenar de sesiones de quimio. En su caso está considerado una enfermedad crónica.
Lucía destacó que colabora con la AECC en Teruel y la apoya porque “nos ayudan psicológicamente, hacen actividades, promocionan el deporte y es una ayuda para el paciente, porque muchas veces te sientes solo y no sabes donde acudir”, comentó.
Como ella otras pacientes que están pasando o han pasado esta enfermedad quisieron hacer visibles sus casos en esta jornada para reivindicar que el rosa es más que un color.