La Corporación de Santa Agueda de Cretas exhibe poder de convocatoria

Las mujeres de Cretas volvieron a demostrar el fin de semana su poder de convocatoria y triunfaron una vez más con la celebración de Santa Agueda, en la que no faltó el traspaso del bastón de mando municipal, el reparto de tetillas, la misa baturra, el baile ni los tradicionales homenajes a la mujer más longeva y más joven de la localidad.

Por Santa Agueda el Matarraña tiene un sabor especial. Las mujeres, pilar fundamental de la vida en los pueblos, honran a su patrona por todo lo alto y, en los municipios donde no es alcaldesa una de ellas, el alcalde les cede el poder simbólicamente durante un día.

Es el caso de Cretas, donde este domingo el primer edil, Fernando Camps, traspasó el bastón a Belén Salvador, que por segundo año consecutivo ejercía de alcaldesa de una Corporación formada por once mujeres.

Este segundo año fue de salida para la comisión aguedera, que lo vivió “con pena porque la verdad es que lo hemos pasado muy bien, pero esperando que salga una junta nueva porque esto cada dos años se renueva”, explicó Salvador, quien no obstante mostró su predisposición a repetir en el futuro.

“No es que haya problemas para que la gente se anime, pero ya hemos ido repitiendo juntas. Yo lo fui en el 84 la última vez y ahora lo he vuelto a ser. Todas las compañeras también habían estado otras veces”, explicó la alcaldesa por un día.

Fiesta grande

La fiesta comenzó la tarde del sábado con la traca y encendido de la hoguera junto al recinto ferial. Allí, hombres y mujeres degustaron una cena en la que la principal novedad fueron los embutidos que se asaron, elaborados íntegramente por la Corporación. También se repartió coc de sucre y después hubo baile y discomóvil hasta las tantas. 

Por ello, sin madrugar demasiado, este domingo se constituyó en la plaza la Corporación. Los concejales del Ayuntamiento impusieron, una por una, las bandas a cada aguedera.

Tras el pregón, a cargo de la flamante alcaldesa, las mujeres recogieron 400 tetillas (bollos cubiertos de chocolate y coronados con una guinda) en un horno y la comitiva, acompañada por la charanga, desfiló hasta la iglesia de la Asunción para oir misa. En el pregón de fiestas, Salvador puso en valor que, tras la reciente reapertura del templo con oficio del cardenal Juan José Omella, la de Santa Agueda era la primera fiesta que se celebraba allí. La iglesia permaneció cerrada al culto durante más de tres años como consecuencia de las humedades detectadas en noviembre de 2014 y que provocaron algunos desprendimientos.

Tras los oficios se homenajeó a la mujer de más edad, Alejandrina, que a sus 98 años se resiste a que nadie le quite su puesto de privilegio; y a la más joven, April, nacida en 2017.

Después llegó la degustación de tetillas y, cómo no, la tradicional suelta de vaquillas en la plaza que precedió a la comida de hermandad entre las mujeres del pueblo.

Estas actividades fueron posibles gracias al trabajo desplegado durante todo un año por las mujeres de Cretas, con la venta de comida en la Feria del Vino del pueblo o en la Feria de la Tapa de Valjunquera.

No hay concejalas

En tono de broma, el alcalde de la villa mostró su “satisfacción” por tener fiesta gracias a la asunción de sus funciones por parte de las mujeres y puso en valor que la festividad “cada día crece” porque “cada vez son más las mujeres que participan, tanto de Cretas como las que vienen de otras localidades para acompañar a las nuevas Corporaciones”.

El simbólico traspaso de poderes tiene en Cretas más valor si cabe, pues la Corporación municipal es en estos momentos exclusivamente masculina. Una situación que lamentó el primer edil, quien aseguró que cuando llegan elecciones “las animo” porque “siempre estamos buscando mujeres que nos acompañen, pero la verdad es que es difícil”, reconoció.

“A ver si el año que viene se animan y se presentan porque la verdad es que cumplen con el trabajo y hacen falta mujeres en las Corporaciones de los Ayuntamientos”, insistió.