La CHE invertirá 1,6 millones de euros para sellar varias filtraciones en una zona del embalse de Caspe
La presa, que se sitúa entre los términos municipales de Alcañiz, Caspe y Maella, registra fugas de agua desde su estreno en el año 1989La Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) realizará obras en el estribo derecho de la presa de Caspe para parar una fuga de agua que sus servicios técnicos habían detectado meses atrás. La intervención no interferirá en la explotación de este embalse que se sitúa entre los términos municipales de Alcañiz, Caspe y Maella, según señaló el presidente del Sindicato Central de la Cuenca del Guadalope, José Fernando Murria.
La actuación consistirá en un refuerzo de la pantalla de impermeabilización del estribo derecho de la presa debido a “una fuga de pequeña envergadura”, según Murria. No obstante, a pesar de no ser un problema que revista mucha gravedad, el coste de la actuación se ha licitado por un montante de 1,6 millones de euros y seis empresas han optado a realizar la obra.
Esta presa ya registró algunos problemas de pérdidas de agua en el estribo izquierdo con anterioridad, lo que ya obligó al organismo de cuenca a intervenir para pararlas.
El proyecto de obras contempla su ejecución en un periodo de nueve meses, si bien el grueso de la obra se llevará a cabo en el año 2024.
La presa, situada en el término municipal caspolino, presenta un problema de disolución de los yesos de sus cimientos, lo que ha llevado a que periódicamente se deba realizar un control de la cimentación para evaluar las filtraciones. Así es como se detectó la fuga en el estribo derecho.
Hasta ahora se había optado por la ejecución o el refuerzo de la pantalla de impermeabilización, manteniendo así en valores aceptables los caudales de las filtraciones. Ahora, con este proyecto se pretenden paliar distintos problemas que se han detectado en la zona, la mayoría de ellos filtraciones en el estribo izquierdo, pero también la falta de eficacia de la pantalla de impermeabilización en los estribos izquierdo y derecho. Además, se pretende mejorar la auscultación de la presa.
Inyecciones para parar la fuga
La actuación, que empezará en unas semanas, consistirá en la realización de distintas inyecciones con las que, a priori, “se sellará la fuga”, comentó el presidente de la Comunidad de regantes del río Guadalope. En este sentido, Murria indicó que “las pérdidas se tienen que sellar, y al igual que ocurrió con el estribo derecho, se va a actuar en el derecho”. En cualquier caso, aclaró que “no va a afectar al llenado del embalse ni a nada que concierna a la disponibilidad del agua para usos de riego, porque no habrá que reducir la cota de llenado”, según precisó. No en vano, “la fuga está en la cara contraria de la presa a la que se almacena el agua y es una pérdida de pequeñas dimensiones, ridícula, a pesar de lo que pueda parecer por el presupuesto, que es altísimo”, enfatizó Murria.
El presidente del Sindicato de regantes del Guadalope explicó que el organismo de cuenca ya les ha informado de la intervención que se va a llevar a cabo en la presa: “nos informaron hace unos días de que iban a empezar la obra, pero nos dijeron que podíamos estar tranquilos, porque no habrá retención de agua que pudiera afectar a la regulación”, explicó José Fernando Murria, quien hizo hincapié en que la intervención será más o menos rápida: “en nueve meses la obra estaría ejecutada”, añadió.
