La calle de acceso al Nuevo Hospital de Alcañiz se corta desde este lunes al tráfico rodado

El trazado de la antigua vía ferrea que discurre por detrás del Paseo Andrade (calle Virgen de la Balma) quedará cortado al tráfico este lunes debido a las obras de urbanización del vial de acceso al Nuevo Hospital de Alcañiz, que se encuentra en fase de ejecución.

La Policía Local informó ayer de que no se podrá circular por esta calle (últimamente muy empleada debido a que el Paseo Andrade está cortado también al tráfico por las obras de humanización de travesías) desde las ocho de la mañana del próximo lunes. La prohibición en la circulación se hará extensible al tramo de confluencia de este vial la carretera de Caspe (N-211), de manera que el acceso desde la avenida de Tortosa quedará cerrado y solamente podrá emplearse por parte del vecindario.

Por consiguiente, los vecinos de la Urbanización Cantagallos mantendrán los accesos a sus viviendas, aunque, como ocurre desde hace varias semanas, estarán condicionados por las obras que se ejecutan en las travesías. Aún así, la Policía Local informó de que podrán entrar y salir por la parte superior de la urbanización aunque siempre deberán ciruclar en sentido calle Belmonte de San José.

El Ayuntamiento de Alcañiz informó de que se “intentará informar a los vecinos mediante una reunión con la empresa que ejecuta las obras del vial, como ya se hizo con las obras de adecuación de las travesías”. No obstante, desde el consistorio rogaron “comprensión a los usuarios en los primeros días de obras hasta que se adquieran los nuevos flujos de tráfico y se valoren” otras medidas para mejorar la fluidez en el tránsito rodado por la zona.

Todo el año de obras

Según los plazos de ejecución de la obra, el vial debería estar acabado en diciembre de este mismo año, esto es, deberá estar entregada la obra de urbanización a principios de 2025, cuando se estima que deberían empezar a ponerse en marcha los distintos servicios del nuevo equipamiento sanitario, que ahora se encuentra en fase de acabados.

Esta obra es imprescindible para que el Nuevo Hospital pueda entrar en funcionamieto, puesto que es su único acceso rodado.

El trazado del vial coincide con el de la antigua vía del ferrocarril de Val de Zafan, en un tramo comprendido entre el cruce con la carretera nacional 211 y el final de la parcela que ocupa el hospital de Alcañiz. Se trata de una calle que discurre paralela al Paseo Andrade. Tiene una longitud de 1,2 kilómetros y una anchura de 28 metros.

El futuro vial tendrá dos carriles de circulación por cada sentido, zonas de aparcamiento, carril bici y aceras en ambos márgenes. Se han proyectado tres rotondas, dos que facilitarán el acceso al recinto sanitario y una tercera para resolver el cruce con la N-211.

La urbanización del vial implica algunos cambios en infraestructuras de la zona, entre los que se incluye el cambio de algunos tramos de acequias de riego y la ejecución de una nueva red de recogida de aguas pluviales y residuales, red eléctrica de media tensión, red de alumbrado público, red de agua potable, red de gas, red de telecomunicaciones y red de riego, entre otras.