Jorge Sodric, propietario de una librería-quiosco en Alcañiz: "Me voy de la papelería con dolor de cabeza por soportar tanta tensión"

Jorge Sodric es el propietario de la Librería Sodric, de Alcañiz, junto a su hermano Luis. Está situada en la Avenida de Aragón, la principal arteria de Alcañiz, pero estos días apenas pasa nadie por la puerta, aunque en su interior siguen al pie del cañón los dos hermanos porque la prensa en un servicio básico, al igual que el material de papelería. 
-¿Tiene la misma clientela o ha cambiado?
-Vienen los mismos clientes que antes, los conozco a todos, pero en mucha menos cantidad.
-¿Ha habido un gran descenso en las ventas?
-Sí, claro, pero bueno, algo sacamos, más que si estuviéramos cerrados. Es que si la gente pasa entra, pero hay muchas personas que tienen miedo La gente mayor que venía a buscar las revistas no viene, no tanto por el miedo a coger la enfermedad sino por lo que la gente pueda decirles.
-¿Hay muchos quioscos abiertos en Alcañiz?
-Creo que los tres que venden prensa. 
-¿La gente tiene ganas de estar informada, se venden más periódicos?
-Muchos menos, lo que mas tenemos es a los bares y ahora están cerrados, no hay mucho movimiento.
-¿Cómo es atender el quiosco ahora, los clientes se toman su tiempo o lo intentan hacer lo más rápido posible?
-La gente compra enseguida, pero como nos conocemos siempre echamos la charradeta, además como no hay nadie siempre te cuentas algo. Notas que ellos quieren hablar,  si viene alguien se va, pero si no viene nadie nos quedamos un rato charrando, se distrae él y yo.
-¿Cómo cree que la difusión de algunas revistas y periódicos de forma gratuita durante estos días va a afectar al sector, fidelizará a clientes o hará que se pierdan los que ya habían?
-Creo que quitarán clientes porque si la gente se aficiona a recibir los contenidos gratis luego no querrá pagar por ellos, aunque me imagino que después de esto no serán gratuitos. Se acostumbrarán a recibirlos gratis y para qué quieren pagar. A la gente mayor le gusta el papel, pero los jóvenes están acostumbrados a hacer todo con la tablet, si lo reciben a través de ahí ya no van a volver al papel.
-¿Qué medidas de protección utilizan?
-Hoy mismo hemos puesto un doble mostrador para que haya más espacio entre nosotros y el cliente. Llevamos mascarilla aunque no guantes, porque nos dijeron desde el hospital de Alcañiz que con los guantes íbamos repartiendo el virus por todos los sitios, en cambio las manos te las lavas cada diez minutos y no lo expandes. Planteamos lavarnos con el guante pero es peor porque se degradaba.
-¿Cómo cobran?
-La mayoría de la gente te paga con tarjeta, nos da igual que se poca cantidad, nunca hemos puesto límite, ni antes ni ahora. Ahora mismo acabo de cobrar un lapicero de 35 céntimos y me han pagado con la tarjeta.
-¿Los bancos deberían de hacer algún tipo de concesión con respecto a las comisiones que cobran a los comerciantes por el uso de tarjeta en esta crisis?
-Pues no estaría de más que quitaran lo que se quedan, que es algo menos de un 2% de cada venta. Pero bueno, nosotros lo hacemos por dar el servicio, ya sabemos que ricos no nos vamos a hacer. Nosotros solo abrimos por la mañana, cuando te vas por la tarde descansas porque te vas de aquí con mucho mal de cabeza de estar todo el rato en tensión, mirando dónde tocas. Abrimos no por ganar dinero, sino por dar servicio, hacemos unas horas y poco más, por si alguien quiere leer o le falta material para los trabajos escolares.
-¿Cuáles son los materiales que más demanda la gente?
-Sobre todo cosas para manualidades, como cartulinas y témperas para hacer el arcoíris, también muchos folios. Son los clientes habituales, ya los conocemos, porque nosotros abarcamos nuestra área, no te va a venir uno del otro lado del puente.
-¿Cómo nota los ánimos en la gente de Alcañiz?
-Muy desilusionada, muy triste, no se sabe bien cómo se va a salir de esto. Ya no es el ahora, es el después, cómo va a arrancar esto, porque estaremos en el bar y pensaremos en que no nos contagien. Creo que tardaremos en volver a relacionarnos, a que esto vuelva a funcionar. 
-¿Qué es lo que da más miedo a la gente, la enfermedad o la situación en sí?
-Creo que es más por la economía que por la enfermedad, si debemos estar la mitad infectados, lo que pasa es que no lo sabemos. Si nos hicieran los test lo sabríamos, porque igual el cliente está malo y me infecta a mí, porque mucha gente no tiene síntomas y sigue hacia adelante.
-¿Usted tiene familia?
-Sí, mi mujer es enfermera y tomo todas las medidas necesaria, ella también, más que nada por los chicos.
-¿Cómo se apañan con los críos?
-Tenemos uno de 11 y otro de 15 y como los dos salimos todos los días a trabajar pues están abandonados toda la mañana, eso sí, entretenidos porque tienen una barbaridad de deberes y no paran en toda la mañana. 
-Está bien que al menos tengan faena.
-Pero con algunos deberes no podemos estar pendientes, nos los mandan a los padres y lo que nos faltaba. Mi mujer tiene que estar pendiente de los enfermos y de los deberes de los críos.
-Una situación atípica
-Sí, muy rara, esto es una película.