Ignacio Montaner, director general de Endesa en Aragón: “Queremos generar cuanto antes empleo y riqueza”

“Estamos haciendo todo lo posible para que esta transición sea lo menos traumática posible”, afirmó el jueves el director general de Endesa en Aragón, Ignacio Montaner, quien se ofreció a generar “puestos de trabajo y actividad económica en la zona” en cuanto el Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico resuelva sobre los 1.050 megavatios de evacuación de la térmica. 

“Estamos trabajando con toda la ilusión precisamente para hacer una propuesta que genere valor y riqueza en Andorra y su entorno, como siempre hemos dicho”, dijo Montaner en declaraciones a los periodistas. El proyecto, que suma un total de 1.725 MW de potencia instalada, “lo hemos dividido en fases”, algo “importante porque hasta que llegue la decisión de los mil MW que va a dejar libre la central nosotros lo que sí queremos es cuanto antes generar puestos de trabajo y actividad económica en la zona”, explicó. 

En este sentido, ahondó, “ya tenemos preparados los dos primeros proyectos”, uno de los cuales, de 50 MW, “lo presentaremos la próxima semana en el Gobierno de Aragón” con la idea de empezar a trabajar a principios de otoño en su instalación en los actuales terrenos de la central.

Desmantelamiento

En cuanto al desmantelamiento, Montaner informó de que los trabajos se encargarán a una empresa externa a la que se exigirá que al menos “un 30% de la mano de obra sea local”, con un porcentaje de bonificación progresivo “hasta una contratación del 80% de mano de obra local”. Cabe recordar que Endesa prevé emplear en estos trabajos, que se alargarán durante cuatro años, a una media de 130 trabajadores, con puntas de 200.

En caso de adjudicarse el total de los 1.050 MW, Endesa invertirá globalmente en este plan de acompañamiento al cierre “casi 1.500 millones de euros en la zona, con una creación de 4.000 puestos de trabajo –fraccionados por fases de construcción de los parques fotovoltaicos y eólicos que planea– de aquí a 2026”, un proyecto que el director regional de la compañía calificó de “muy potente” e “ilusionante”, pues incorpora “criterios de innovación tecnológica”. 

Montaner explicó que 20 de los 153 trabajadores que tenía Endesa en la planta hace un año ya han sido recolocados, y descartó el mantenimiento de las chimeneas como elemento patrimonial y posiblemente turístico. En primer lugar, porque “no hemos recibido ninguna propuesta formal” de nadie que se quiera hacer “cargo de esas instalaciones”, y en segundo porque “consideramos que va a generar más riqueza que los terrenos de la central se dediquen al proyecto solar, salvando seguramente o que es el edificio de los alternadores para dar más consistencia a la generación de la energía” futura.

Quieren certezas

Por su parte, los trabajadores de las subcontratas de la térmica insistieron en saber “cuándo  va a empezar el desmantelamiento”. “El problema que tenemos es que en junio vamos todos a la calle y no sabemos si la empresa que viene a acometer el desmantelamiento y el montaje de las placas nos va a coger”, dijo Pedro Miñana, ayer portavoz de la Plataforma. 

Piden al ministerio que insista a Endesa para que cuente con ellos, sobre todo con los más cercanos a la edad de jubilación, y aseguran que la reunión de ayer “se podría haber celebrado hace un año”. 

El presidente del comité de Endesa, Hilario Mombiela, incidió en la formación para el desmantelamiento de la térmica y el montaje de los paneles fotovoltaicos. “Se nos prometió que iba a estar en marcha en febrero”, dijo, pero no ha sido así cuando “esos cursos son básicos”. 

Mombiela deseó que el convenio “esté firmado cuanto antes y todos los organismos se pongan en marcha, porque también nos han dicho que no sólo está implicado este ministerio, sino otros como Fomento, Agricultura o Industria”.

Por último, confió en que Transición Ecológica no consienta que “trileros vengan aquí a especular ”con los MW.