Gobierno aragonés, Coca-Cola y Sylvestris reforestan el 25 % del perímetro del incendio Aliaga-Ejulve
La última campaña incluye 60.250 árboles, balsas y lugares de disfrute compartido del monteEl Gobierno de Aragón y empresas como Coca-Cola o Sylvestris han realizado actuaciones de reforestación en 1.750 hectáreas de monte público de las casi 7.400 globales que se calcinaron en el incendio Aliaga-Ejulve en 2009. La última campaña, que concluirá en 2025, incluye la plantación de otras 50 hectáreas donde se instalarán 60.250 pinos, encinas y sabinas que la Dirección General de Gestión Forestal espera que prosperen, aunque para ello tiene que llover más.
Este área, dependiente del Departamento de Medio Ambiente y Turismo, ha puesto en marcha recientemente tres líneas de trabajo en el monte denominado Masías de Ejulve, con actuaciones que comenzaron en 2023 y terminarán en el próximo año. Se engloban en el plan de restauración del incendio fatídico que en julio de 2009 arrasó masas forestales en Ejulve, Aliaga, Cañizar del Olivar, Castel de Cabra, La Zoma y Villarluengo.
La primera actuación consiste en finalizar las labores de restauración de los terrenos públicos que se vieron afectados por el fuego. En concreto, hasta 2025 se van a reforestar 50 hectáreas con 60.250 plantas de las que 9.125 son sabinas, 9.125 encinas y 42.000 pinos. Los trabajos en el paraje de La Pantorra, en Ejulve, fueron visitados ayer por la directora general de Gestión Forestal, Ana Oliván.
Además, Medio Ambiente mejorará 14 kilómetros de caminos y realizará tratamientos selvícolas para clarear la vegetación existente, adecuando la densidad en 10 hectáreas. La inversión conjunta de estas tres actuaciones rondará los 325.000 euros.
Más de 10 millones en 15 años
Cuando concluyan estos trabajos, la inversión total que desde el año 2009 habrá destinado el Gobierno de Aragón a la restauración de las más de 2.600 hectáreas de montes públicos afectadas por el incendio Aliaga-Ejulve habrá sido superior a los 10 millones de euros en estos seis términos municipales, explicó Oliván. Se ha reforestado una superficie que antes del incendio estaba cubierta fundamentalmente por pinares y carrascales.
El ingeniero de montes Emilio Pérez indicó que, desde 2009, el Gobierno de Aragón ha acometido cinco fases de reforestación, con 1.000 hectáreas en total, a las que se suman otras 750 hectáreas entre Coca-Cola, Sylvestris y voluntarios de la zona.
“Casi todo lo que hemos plantado ha tenido éxito”, aseguró Pérez. Cuando acaben los trabajos actuales, detalló el técnico, “estará plantado todo aquello que es monte público y es susceptible de recibir vegetación arbórea en los próximos años; serán 1.800 hectáreas reforestadas con seis especies: en las zonas altas de Majalinos pino silvestre, quejigo y endrino, y en las bajas pino carrasco, sabina y encina”.
“La reforestación se consigue a base de insistir y para ello está la reposición de las marras”, dijo Oliván, quien aclaró que en toda la superficie de monte público en la que se ha intervenido –2.600 hectáreas– no siempre se ha replantado, bien porque ha habido regeneración natural, bien porque los terrenos no eran adecuados para que prosperaran las especies o porque había que favorecer otros usos y hábitats para la fauna. “Se ha considerado no reforestar también para que haya pasto”, especialmente en la reserva de caza Masías de Ejulve, especificó. En la zona también hay una buitrera.
Fomentar el uso social
Desde 2009, “lo primero fue retirar la madera quemada, la actuación más urgente, y desde entonces se está trabajando de manera continua, no solo con plantaciones sino también con actuaciones de otro tipo” como la mejora de puntos de agua, explicó Oliván. “Una parte muy importante dentro de los montes no solo es recuperar el medio natural, sino tratar de que se recuperen la mayor parte de los usos posibles. Eso, gracias a la gestión forestal concebida de manera integral, es posible y de esta forma damos pie a que se fomente el uso social y tengamos más gente disfrutando de la naturaleza”, indicó.
En este sentido, se ha construido una barbacoa cubierta con mesas junto a la fuente de La Pantorra que permite aumentar el uso recreativo del monte, con una inversión adicional de aproximadamente 22.000 euros. También se ha mejorado la Pamplona, una antigua balsa de tierra que utilizaba el ganado que se ha transformado en un punto polivalente que podrán utilizar tanto las reses como la fauna silvestre. Servirá igualmente como punto de agua para el operativo de extinción de incendios, mediante la impermeabilización y hormigonado de la misma, con una inversión de unos 25.000 euros. Estas dos actuaciones complementarias las han realizado empresas de la zona, Victorino Marco SLU y Moncavi SL.
Oliván agradeció la colaboración privada que el Gobierno de Aragón ha encontrado en empresas como Coca-cola, propietaria de la embotelladora de agua de Cañizar del Olivar, y Sylvestris, consultoría ambiental que trabaja para la compensación de la huella de carbono de empresas.
Explicó que el proceso de recuperación de un monte tras un incendio es largo y depende de las especies y de la climatología posterior. “Si vienen años buenos donde llueve más es más fácil que tengamos una regeneración natural. De hecho, en algunas zonas se produce, pero cuando vemos que no llega es momento de actuar y acelerar el proceso para que el medio se recupere antes”.
Preguntado por si espera nuevas campañas tras las 1.800 hectáreas reforestadas, el alcalde de Ejulve, Ovidio Ortín, manifestó que “si no llueve, no se pueden hacer plantaciones porque es absurdo gastar un dinero que después no va a valer para nada”.
“Ha habido plantaciones que han tenido éxito y otras no tanto, pero la verdad es que se ha notado; si esperas que regenere por sí solo le cuesta mucho”, añadió. “Estos 15 años han sido difíciles porque esperábamos haber tenido más apoyo del Gobierno de Aragón en los primeros años y no fue así. La Administración reacciona siempre muy tarde, tanto en riadas como en incendios”, concluyó Ortín.