Foz Calanda construirá otra nave nido y la alquilará a pequeños emprendedores

Algunos de los ayuntamientos más afectados por la despoblación intentan buscar alternativas para frenar la pérdida de habitantes. Uno de los que se ha puesto manos a la obra en ello es el Ayuntamiento de Foz Calanda, que va a promover la construcción de una nave en su polígono industrial que pueda albergar a pequeños emprendedores locales o provinciales. El objetivo es favorecer la generación de empleo de este municipio azotado por la pérdida de habitantes. Actualmente, su censo es de 238 personas.

Con un importe de 299.351 euros, el Ayuntamiento promoverá las obras de construcción de una nave de casi 1.000 metros cuadrados. Este presupuesto también incluye la pavimentación y el vallado de la parcela, la instalación de todas las redes de saneamiento, pluviales, de energía y telecomunicaciones, así como la adecuación de una linea eléctrica de baja tensión. 

El objetivo del proyecto de obras es "facilitar la implantación de pequeños talleres e industrias que ayuden a crear tejido productivo y, por ende, a la generación de puestos de trabajo que asienten población y atraigan a nuevos trabajadores a la localidad para así incrementar el número de habitantes.

El Ayuntamiento justifica la obra haciendo hincapié en la "preocupante despoblación que sufren las pequeñas localidades de la provincia como consecuencia de la falta de posibilidades de desarrollo económico que tiene hoy en día la población joven". Así las cosas, el cometido que se propone el consistorio es "intentar paliar esas deficiencias", para lo que ha planteado la construcción de otra nave nido -ya tiene una en el mismo polígono alquilada a emprendedores- con el fin de poner su grano de arena en la lucha contra la despoblación. Así las cosas, la nave "se destinará a facilitar el establecimiento de pequeñas industrias nido con el objetivo de generar puestos de trabajo". Así lo puso de manifiesto el alcalde de Foz Calanda, Xavier Tarzán, quien hizo hincapié en que "pretendemos generar, como mínimo, un empleo".

El Ayuntamiento ha contactado con alguna pequeña empresa "y tenemos esperanza, pero tampoco queremos lanzar las campanas al vuelo, porque antes hay que tener aseguradas las cosas", dijo Tarzón. 

La intención es subdividir la nave y que queden cuatro espacios de 250 metros cuadrados. Foz Calanda ya hizo lo mismo con otra nave que ahora está completamente ocupada. "Haremos un llamamiento para que otras pequeñas o medianas empresas, pymes o micropymes nos escuchen y podamos sacar adelante el proyecto", comentó el regidor.

El consistorio ha de aprobar las condiciones por las que se adjudicarán los espacios en la nave. "Tiene que ir a pleno, pero serán ventajosas, es lo único que puedo adelantar, porque siempre lo han sido", añadió. 

Experiencia positiva

La experiencia acumulada en la primera nave nido ha sido positiva. Una de las empresas instaladas allí genera "siete u otro puestos de trabajo", así que el consistorio ha decidido repetir la iniciativa. la ubicación del polígono local es ventajosa. No en vano, el área está a pocos kilómetros del pueblo, que dista apenas tres o cuatro de la carretera nacional 211. Además, en el pueblo tienen servicio de fibra óptica de 600 megas y el ayuntamiento está "negociando con Telefónica para que lleve la fibra al polígono", lo que para el regidor sería "buenísimo". No en vano, "la fibra óptica es un servicio principal y disponer de ella en los polígonos es ya una necesidad de primer orden para las empresas", subrayó el regidor.

La primera se construyó en 2003 y generó varios empleos

La nave que Foz Calanda tiene levantada y alquilada en su polígono se construyó en 2003. En aquel momento se levantó con la finalidad de promover y facilitar la implantación de pequeños talleres o industrias para la generación de puestos de trabajo, para fijar o atraer población y para frenar el descenso de habitantes que venía sufriendo el municipio desde hacía años. En este sentido, ahora hay otro aliciente para construir otro proyecto similar: el cierre de la central térmica de Andorra y los efectos que provocará en toda la economía de la zona, pues puede acelerar más esa caída de habitantes. 

La primera empresa que se instaló en aquella nave fue una dedicada a la fabricación y ensamblaje de cableado eléctrico. Posteriormente, y durante varios años, aquella nave se destinó al almacenamiento de material y equipos y al entretenimiento y ensayos de una pequeña empresa dedicada a los espectáculos circenses y al entretenimiento de la población infantil durante las fiestas patronales. Fue el final de la actividad de esta compañía de espectáculos lo que llevó al consistorio a subdividir la nave en cuatro locales de 250 metros cuadrados para permitir su ocupación a más de un interesado. Desde entonces, tres de las zonas están ocupadas y un cuarto espacio lo utiliza el Ayuntamiento. 

Foz Calanda tenía 722 habitantes en 1940 y en 1999 llegó a 240 habitantes. En ese periodo perdió el 64% de su población. Veinte años después, el municipio ha roto a la baja el mínimo marcado en 1999. Es por ello que ahora ha decidido volver a construir una nave nido para intentar revertir este descenso de habitantes.