Endesa quiere comenzar a construir el parque solar de Andorra el próximo año

Endesa pretende comenzar a construir “la mayor planta fotovoltaica de Europa”, su proyecto de 1.000 MW en el entorno de Andorra, nada más cerrar la central térmica, de forma que los 400 empleos anuales durante cinco años que estima se “solapen” con los trabajos de desmantelamiento de la antigua instalación, que alcanzarán picos de 200 empleados.

“Endesa está comprometida con la transición justa y Andorra puede ser un ejemplo de hacer bien las cosas”, dijo en esta localidad tras reunirse durante más de dos horas con el Ayuntamiento el director general de la eléctrica en Aragón, Ignacio Montaner, quien no obstante advirtió de que si el Gobierno de España “dijera que hay que repartir” los 1.050 MW que dejará disponibles la central térmica “tendríamos que replantear el proyecto”.

Acompañado de la directora general de Sostenibilidad de Endesa, María Malaxechevarria, Montaner aseguró al equipo de gobierno de Andorra, liderado por el alcalde Antonio Amador, que el Ayuntamiento recibirá de Endesa 12,5 millones de euros “en los próximos tres años”. En este cómputo entran los 1,9 millones que generará en impuestos el desmantelamiento, sumados al impuesto de construcciones (32 millones de euros a repartir, según los megavatios instalados, entre los cinco municipios que abarca el parque solar) y al IBI e IAE de las placas fotovoltaicas (3,8 millones de euros anuales).

Con este caramelo en la boca, Amador hizo una valoración “positiva” del proyecto, si bien anunció que “no nos podemos conformar con el parque solar” y emplazó a una nueva reunión, esta vez con la cúpula de Endesa, para que la compañía “participe de forma activa en la búsqueda de nuevas empresas del sector de las renovables para su implantación” en la zona.

Endesa se mostró también favorable a ceder la vía de tren que acaba en la térmica, así como las infraestructuras hidráulicas de captación de 18 hectómetros cúbicos anuales de agua del pantano de Calanda, dos aspectos en los que no ha habido avances        –tampoco en cuanto a la Elevación de Aguas del Ebro– desde que Endesa anunció el cierre de la central hace ocho meses. 

El plan de Endesa

Endesa insistió en “sincronizar” la construcción del proyecto de 1.0000 MW a los trabajos de desmantelamiento para “garantizar la transición justa”. De esta forma, podrían estar trabajando en estas dos actividades hasta 600 personas durante al menos cuatro años, tiempo que Endesa considera suficiente para dar empleo, mientras llegan otras industrias, a los trabajadores de empresas auxiliares que ahora temen por su futuro.

“Podrían empezar los trabajos de la primera fase del parque solar a mitad del año que viene”, afirmó Montaner, quien aseguró que la inversión de 800 millones de euros “no está vinculada a ninguna subasta”.

“Estamos comprometidos a hacer ese parque solar desde ya, continuó Montaner. “Un proceso de subasta requeriría de un nuevo gobierno y una aprobación en Bruselas”, a efectos prácticos “dos o tres años” de trámite en los que por el medio Andorra y comarca perdería vecinos.

Endesa emplazó a que se constituya un nuevo Gobierno de España capaz de resolver el plan de cierre que ha presentado para la térmica y que decida sobre la capacidad de evacuación que dejará la planta de combustión de carbón, que no obstante “es para el titular con la legislación actual”, aseguró la compañía.

Sin embargo, el borrador de Ley de Cambio Climático y Transición Energética presentado por el actual Gobierno en funciones de Pedro Sánchez ha recibido enmiendas por parte del Gobierno de Aragón, que pretende que los 1.050 MW sean subastados para que puedan acceder también empresas aragonesas. De la misma opinión es el Clúster de la Energía de Aragón y la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), el organismo regulador.

Endesa instó a valorar si, hoy por hoy, hay un proyecto que vaya a generar tanto empleo en el próximo lustro como el que ella propone. Su plan llevará aparejados “cursos de capacitación” para los empleados de las contratas, tanto en “temas de desmantelamiento como para la construcción de la central solar fotovoltaica”, garantizó Montañés. “No está directamente relacionado, pero hemos querido dar en Andorra, a partir del próximo lunes, uno de los tres cursos” aparejados a otros 14 proyectos solares de Endesa en Aragón que suman cerca de 400 MW y 500 millones de inversión”, resaltó. 

70 empleos durante 25 años

Al término de la construcción del parque solar, el empleo en mantenimiento y explotación –25 años– será apenas de 60 puestos de trabajo, diez más con el “plus de innovación” que suponen las baterías de almacenamiento que irán asociadas al proyecto, algo que valoró el alcalde de Andorra si bien no le pareció suficiente.

El parque solar “no soluciona por sí solo el impacto que supone el cese de la actividad de la térmica”, dijo Amador, “si bien durante algunos años habría unos picos de trabajo muy elevados”.

También valoró el regidor que la empresa esté dispuesta a ceder la vía de transporte de carbón  que parte de la línea ferroviaria Barcelona-Zaragoza, así como la concesión de agua de Calanda.

Preguntado por la situación de desamparo en la que se encuentran los usuarios del sindicato de riegos del Guadalope, Montaner no aclaró si Endesa dejará de aportar los 1,5 millones de euros actuales el 30 de junio de 2020 o lo alargará un tiempo hasta que los regantes tengan alternativas.

El sector eléctrico baja un 10,2% las emisiones de CO2 por su elevado precio

El sector eléctrico emitió 24,7 toneladas de CO2 en la primera mitad de 2019, lo que supone un 10,2 por ciento menos que en el mismo periodo del año anterior, y la segunda cifra más baja de los últimos nueve años, según datos de Red Eléctrica Española (REE) recopilados por Europa Press. Este caída se produce, según WWF, por un menor uso del carbón y un precio más alto de la tonelada de CO2.

La responsable del Programa de Clima y Energía de WWF, Mar Asunción, explicó a Europa Press que la generación eléctrica a partir de carbón pasó de un 18% del mix energético en enero de este año a un 4% en junio. Por el contrario, la producción de gas sufrió un gran aumento, pasando de un 14% en enero a un 32% en junio, "casi duplicándose".

A juicio de esta experta, el hecho de que la producción a partir de carbón obligue a la compra de un gran volumen de derechos de emisión cuando el precio de la tonelada de CO2 ha pasado de 5 euros en 2017 a 25 en 2019 hace que "no sea rentable".

Por su parte, la responsable de la Campaña de Energía y Cambio Climático de Greenpeace, Tatiana Nuño, añadió que también se ha empezado a generar más electricidad a partir de ciclo combinado que, aunque es combustible fósil, emite menos CO2 que el carbón.

"Han funcionado más ciclos combinados de gas, menos carbón y ha habido más energía hidráulica en comparación con los años anteriores. Además, se han aprovechado mejor las energías renovables", añadió.

30,4% menos que en 2011

Según se desprende de los datos de Red Eléctrica de España (REE), hasta junio de 2019 se ha emitido un 30,4% menos de toneladas de CO2 por parte del sector eléctrico que en 2011, primer año del que se facilitan datos de estas emisiones por parte de REE.

De estos nueve años, 2012 fue el que registró un volumen más alto de emisiones de CO2 durante la primera mitad, con 43,6 millones de toneladas.

En la primera mitad de 2019, un 33,4% de las emisiones de CO2 corresponden al ciclo combinado; un 33%, al carbón; un 22,6%, a la cogeneración; un 9%, a fuel y gas; y un 1% a residuos no renovables.

Mientras, en el mismo periodo del año pasado, el 52,2% de las emisiones generadas correspondieron al carbón. Las emisiones generadas por energía producida a partir de carbón se han reducido un 42,6% este año.