El suministro por los Bomberos al campin de Alcañiz seguirá hasta que se ejecute la conexión a la red

El suministro de agua por parte del servicio de bomberos de la Diputación Provincial al campin de Alcañiz continuará en los próximos meses hasta que esté concluida la obra de abastecimiento y saneamiento de la instalación turística, que el Ayuntamiento de Alcañiz tiene previsto sacar a licitación en los próximos días. El campin consume a la semana una media de entre 36.000 y 48.000 litros de agua, en función de la época turística y de la cantidad de usuarios. 

El abastecimiento por parte de los bomberos lleva tiempo en marcha. Comenzó cuando en 2014 se llevó a cabo el vaciado del embalse de La Estanca -de donde se abastecía la instalación turística- con motivo de los trabajos de auscultación de la pared de al presa, que tenía problemas de estabilidad y de pérdida de materiales. “Al bajar el nivel del agua, la toma se quedó fuera y el bombeo dejó de funcionar, así que comenzamos a abastecer al campin con camiones propios y de bomberos”, explicó el alcalde, Juan Carlos Gracia. Así fue hasta que cerró por los problemas con el anterior adjudicatario “y cuando reabrimos en septiembre del año pasado, volvió a reanudarse el suministro por parte de bomberos”, añadió el edil.

La obra para ejecutar la conexión de la instalación con la red municipal de agua potable y saneamiento tiene un coste de 260.000 euros. A priori, se trata de una intervención “sencilla” técnicamente, según valoró Gracia. Básicamente, consiste en conectar el campin con la toma de abastecimiento de agua potable, que se encuentra a pocos kilómetros de distancia, en el camino de la antigua vía del tren. “En sí, solamente hay que realizar las zanjas y pasar las tuberías”, señaló el regidor, que se mostró convencido de que la obra “estará acabada en dos o tres meses”.

El abastecimiento al campin de Alcañiz tiene un presupuesto de 260.000 euros y cuenta con una financiación de 200.000 euros del Fondo de Inversiones de Teruel (Fite), así que la justificación de obra tendrá que realizarse antes del 31 de diciembre. Según explicó el alcalde, “una vez esté adjudicada, habrá que valorar si comenzamos las obras inmediatamente o esperamos a que termine el Gran Premio de Moto GP”, programado para el 22 y 23 de septiembre. En este sentido, apuntó que “lo consultaremos con los adjudicatarios, porque quizá sea mejor no empezar antes para no molestar durante el desarrollo de la competición por el uso de la instalación”.

Cada dos o tres días

El suministro por parte de los bomberos se mantendrá hasta entonces. Un camión de 12.000 litros de capacidad ha aportado agua a los dos depósitos del campin desde que los nuevos adjudicatarios se hicieron con el contrato de gestión. Según fuentes del servicio de bomberos, cada dos o tres días, un vehículo se desplaza hasta La Estanca para que al campin no le falte agua, aunque también ha sido el Ayuntamiento el que, en alguna ocasión, ha desplazado un vehículo propio.

El gerente del campin, Ángel Quílez, valoró el servicio, que “se ha prestado con diligencia. De no ser por los bomberos, “no hubiéramos podido permanecer abiertos”, consideró. En este sentido, Quílez destacó que “no hemos tenido falta de agua porque el abastecimiento se realiza de manera muy puntual”. Además, “si en algún momento hemos tenido una necesidad de agua mayor, como pasó durante la celebración del Gran Premio de Moto GP del año pasado, Diputación nos ha enviado otro camión”.

El agua que suministra el parque de bomberos de Alcañiz se destina “al uso general de la instalación, principalmente a duchas, cocinas y agua de boca”, ya que la de la piscina, la del riego de los jardines y arbolado procede del propio embalse de La Estanca. Según Quílez, “los riegos y el llenado de la piscina se realizan con agua del embalse a la que también efectuamos un tratamiento, en función de lo que estipula la normativa”. 

Los vertidos con un coste alto 

El abastecimiento se ha solucionado de manera provisional con la aportación de agua por parte del servicio de bomberos, pero lo que representa un “problema” para los gestores del campin es la gestión de los vertidos, que se realiza mediante un gestor autorizado y que genera unos costes altísimos a la empresa. 

“El camión suele venir un par de veces a la semana a recoger las aguas sucias, y en función del número de usuarios puede pasar hasta tres veces por semana, y esto nos está generando unos gastos enormes”, se lamentó Quílez, quien aseguró que “de media son unos 4.000 euros mensuales, aunque meses como julio hemos pagado 7.000 euros”. Es por ello que el gestor espera como agua de mayo que las obras de adecuación de la red de saneamiento para el campin empiecen cuanto antes. “El compromiso del Ayuntamiento era  que las conducciones para la evacuación de las aguas de vertido se ejecutarían lo antes posible, pero pronto hará un año que asumimos la gestión”. Aún con todo, se mostró esperanzado. “Parece que todo está a punto de resolverse y que en unos días licitarán las obras. Eso esperamos”, añadió.