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El Recuenco de Ejulve protagoniza una publicación del Foro de Geoparques El Recuenco de Ejulve protagoniza una publicación del Foro de Geoparques
Presentación de ‘Las cuevas y el karst’, el miércoles en Ejulve. Geoparque

El Recuenco de Ejulve protagoniza una publicación del Foro de Geoparques

La ciencia interpreta el fin de una era glaciar con una estalagmita de la cueva
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El Geoparque del Maestrazgo celebró esta semana el Día Mundial del Medio Ambiente con la presentación en Ejulve del libro Las cuevas y el karst, un viaje a través de los geoparques españoles. Entre otros atractivos naturales de la geografía española, la publicación recoge información sobre la Cueva del Recuenco de esta localidad, cavidad en la que se ha fijado la comunidad científica internacional para interpretar el fin de una de las últimas eras glaciares que se produjeron en el sur de Europa hace unos 240.000 años.

Se trata de una publicación divulgativa de 115 páginas editada por el Foro Español de Geoparques en 2023 tras la celebración en 2021 del Año internacional de las cuevas y el karst, coordinada por expertos en la materia.

“En nuestro caso nos asignaron hablar de temas vinculados con la paleoclimatología, con el clima del pasado”, explicó el director científico del Geoparque del Maestrazgo, Luis Mampel, que firma el artículo junto al investigador Carlos Pérez Mejías.

En un estudio publicado por la revista científica PNAS en 2017, el paleontólogo y sus colaboradores hallaron indicaciones de qué mecanismos intervienen a la hora de producirse los cambios abruptos de temperatura gracias al estudio isotópico y de metales de la estalagmita Artemisa de la Cueva del Recuenco.

A través de la observación de este espeleotema se pudieron concretar eventos áridos que afectaron a Europa, pudiendo extrapolar de esta manera cómo se desarrollaron a escala global estos periodos e interpretar alteraciones en el futuro.

Mampel y Mejías cuentan que el origen de la estalagmita data de hace 262.000 años. “El estudio de isótopos estables –átomos de oxígeno y carbono, principalmente– de Artemisa reveló la existencia de condiciones de aridez extrema en el Maestrazgo hace 249.000, 231.000 y 223.000 años. Artemisa registró el fin de una edad glacial tras un cambio en el movimiento de precesión (variaciones en la dirección del eje de rotación de la Tierra), con lo cual la insolación que llegaba a este territorio comenzó a ser cada vez mayor”.

“Este aumento se vio potenciado asimismo por una mayor inclinación del eje terrestre (mayor oblicuidad) alcanzada hace 249.000 años. Con una mayor oblicuidad, los veranos se hicieron más cálidos al mismo tiempo que los inviernos se volvieron más fríos”, añaden.

“En este contexto se derritieron parte de los casquetes glaciares de la Tierra dando lugar a profundas alteraciones en la circulación marina en el norte del Atlántico. Gracias a Artemisa conocemos estos eventos ocurridos durante el final de una glaciación que culminó con un momento máximo de insolación en el hemisferio norte”, concluyen.

En la publicación se detalla que el paisaje kárstico –fenómeno de disolución y precipitación de carbonato cálcico por acción del agua– del Parque Cultural y Geoparque Maestrazgo “comprende más de 1.200 kilómetros cuadrados de calizas mesozoicas, donde destacan las Grutas de Cristal de Molinos, visitables para el gran público”. Además, empresas turísticas locales ofrecen bautismos espeleológicos en cuevas como Val de la Zoma (La Zoma) y el propio Recuenco.

“Había estudios muy interesantes y novedosos en la Cueva del Recuenco pero no se había hecho prácticamente nada de difusión en el ámbito local”, explicó Mampel a este diario. En esta edición se puede comprobar que “el clima ha cambiado de manera muy variada y tenemos evidencia de cómo afectan también, entre otras cosas, los movimientos planetarios de la tierra”, a los que “se suman los efectos antrópicos que alteran toda esta dinámica” y generan el cambio climático.

El reto es compaginar la investigación científica con el disfrute de la cueva “de forma que no perdamos ningún valor”, advirtió Mampel. Las visitas para el público en general se hacen siempre en condiciones “muy controladas”, bajo el permiso del Ayuntamiento y la supervisión y la seguridad de la empresa de turismo activo Geoventur.

Municipio turístico singular

En la presentación del libro, el miércoles en Ejulve dentro de la Semana de los Geoparques Europeos 2024, participó el propio Mampel; el alcalde, Ovidio Ortín; concejales y el gerente del Geoparque del Maestrazgo, Ángel Hernández. Este último señalo que está previsto organizar en octubre una jornada para reivindicar el municipio como “destino turístico singular”.

Y es que en él se puede practicar espeleología deportiva en el Recuenco, senderismo hacia otro enclave geológico como la Caleja del Huego, disfrutar curveando la Silent Route, avistar pájaros en varios enclaves y próximamente otear el firmamento con un observatorio astrológico. “Son atractivos variados y queremos vender que Ejulve, después de los incendios de 2009 y teniendo un patrimonio mayor, se ha reinventado y se ha consolidado como un destino alternativo que funciona”, dijo Hernández.