El proyecto de Endesa para el Nudo Mudéjar contempla la instalación de 1.844 MW eólicos y fotovoltaicos hibridados en 13 municipios

El Boletín Oficial del Estado (BOE) publicará esta semana el proyecto de energías renovables de Endesa para el Nudo Mudéjar de Andorra, con lo que se activará el trámite de información pública para la declaración de impacto ambiental y la autorización administrativa previas a la construcción en el Bajo Aragón de siete centrales fotovoltaicas hibridadas con otras siete plantas eólicas, 14 subestaciones eléctricas y 14 líneas aéreas de alta tensión.

El conglomerado energético, promovido por Enel Green Power España –filial renovable de Endesa–, comprende una potencia instalada de 1.844,11 megavatios (MW) en los términos municipales de Albalate del Arzobispo, Alcañiz, Alcorisa, Andorra, Calanda, Castelnou, Híjar, Jatiel, La Puebla de Híjar y Samper de Calanda. Incluye también la localidad zaragonana de Lécera.

La instalación híbrida con más potencia instalada, 537,79 MW, recibe el nombre de Regallo. Está formada por la planta fotovoltaica Calandrias, de 426,19 MW y el parque eólico El Castillo, de 111,6 MW. Le siguen las duplas híbridas San Martín, con 454,37 MW, formada por la planta fotovoltaica y de almacenamiento San Martín (280,77 MW) y la eólica Empeltre (173,6 MW); Pitarra, de 259,23 MW, compuesta por la planta fotovoltaica Regallo (151,22 MW) y la eólica Pitarra (108,04 MW); La Plana, de 183 MW (fotovoltaica Santa María -96,24 MW- y eólica La Plana  -86,8 MW-); La Masada, de 152,84 MW (fotovoltaica Calanda -41,24 MW- y eólica Alcor         -111,6 MW-); El Tambor, de 132,3 MW (fotovoltaica y de almacenamiento El Tambor -84,3 MW- y eólica La Torica -48 MW-) e Ítaca, de 124,54 MW (fotovoltaica San Macario -68,74 MW- y eólica Ítaca -55,8 MW-).

En cuanto a la infraestructura de evacuación eléctrica –las 14 subestaciones y 154 kilómetros de cableado de alta tensión, casi todo aéreo–, además de los municipios antes referidos en Teruel para las plantas energéticas, afectará también a Vinaceite, en la provincia de Teruel, y en Zaragoza tocará solamente el término de Almochuel.

Las subestaciones, una para cada central energética y con el mismo nombre, transformarán a 220 y 400 kilovatios (kV). Cuatro de ellas (La Masada, La Plana, Alcor y Regallo) serán “colectoras” del resto, con el objetivo final de llevar la energía producida al Nudo Mudéjar, punto de evacuación a Red Eléctrica de España donde el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (Miteco) adjudicó a Endesa 1.202 MW de conexión.

Se activa la tramitación

Con la salida a información pública en el BOE y en la página web del Miteco, algo que podría ocurrir este mismo miércoles según fuentes gubernamentales consultadas, se activa la maquinaria administrativa del proyecto de energías renovables más grande que ha tramitado nunca el Gobierno de España en la provincia de Teruel, y el primero que tiene lugar en el país después de que un promotor se adjudicara un concurso de Transición Justa para el acceso a la red de transporte de electricidad liberado tras cerrar una planta de generación. Afecta al Nudo Mudéjar 400 kV, al que estaba conectada la central térmica de Andorra, propiedad de Endesa. Además de la calidad técnica, la concesión del Miteco ha tenido en cuenta cuestiones socioeconómicas para recuperar el empleo y la riqueza perdidos con la clausura.

En concreto, se activarán tanto la solicitud del estudio de impacto ambiental como la solicitud administrativa previa del proyecto. Las entidades y particulares que se consideren afectados tendrán 30 días hábiles a partir del día siguiente a la publicación en el BOE para formalizar sus alegaciones.
Con toda la información, el Miteco formulará la Declaración de Impacto Ambiental (DIA) que moldeará el proyecto definitivo de la compañía eléctrica que, junto al plan de acompañamiento socioeconómico, tiene que estar ejecutado en verano de 2029. El director general de Endesa en Aragón, Ignacio Montaner, manifestó el 19 de enero en Andorra, durante la voladura de la tercera y última caldera de la térmica, que “firmaría para que en verano de 2025” pudieran “estar trabajando con los 14 proyectos”, en referencia al inicio de las obras.

Montaner subrayó entonces que la salida a información pública de la iniciativa supondrá “un hito muy importante que dará visibilidad” al proyecto. Pidió que la implicación que están mostrando el Miteco y el Gobierno de Aragón –que ha declarado de Interés Autonómico la inversión para agilizar plazos– “sea si cabe todavía mayor para una rápida tramitación de este proyecto y que los trabajos se puedan empezar a la mayor brevedad”.

El responsable reconoció que “el proceso se ha retrasado un poco”, tanto el concurso –finalizó en agosto de 2023, pese a que la adjudicación provisional fue en noviembre de 2022– como los proyectos. Confió en superar cómodamente la DIA: “Los proyectos están muy trabajados, llevamos más de cuatro años haciendo estudios de avifauna” y “casi todos los acuerdos con los propietarios están firmados; estamos haciendo las cosas bien”.

Hibridación, almacenamiento y 642 MW más para garantizar el suministro

El proyecto de Endesa incluye tecnología hibridada y el almacenamiento con dos plantas de baterías para aprovechar al máximo el rendimiento, ofrecer mayor calidad y seguridad energética, y equilibrio en el servicio al producir el mayor número de horas posible. Es por ello que la capacidad instalada y la de evacuación varían en 642 MW.

A las centrales y baterías se une un electrolizador de 15 MW que permitirá gestionar los excedentes de energía renovable para la producción de hidrógeno verde que ayudará a descarbonizar industrias del entorno, la construcción de una fábrica de electrolizadores, y un compensador síncrono que permitirá verter esa energía renovable con mayor calidad favoreciendo el buen funcionamiento de la red.

El capital necesario para esta inversión, que supera los 1.800 millones de euros, lo pondrá íntegro Endesa, que no busca inversores para este proyecto en concreto.

Junto con el plan socioeconómico, del que depende en gran medida el desarrollo renovable, generará más de 6.300 empleos en total, de los que más de 370 serán directos y estables ligados a las centrales. En total, serán 500 trabajos duraderos a partir de 2028 de la mano de los 30 socios del plan.