El nuevo alcalde de Alcañiz, Ignacio Urquizu, promete dinamizar comercio y turismo en “un tiempo nuevo” para la ciudad
Cs e IU apoyaron la candidatura de los socialistas, que recuperan la Alcaldía después de 32 añosTreinta y dos años después, Alcañiz vuelve a tener un alcalde socialista. Ignacio Urquizu Sancho tomó posesión, tras recibir el apoyo de nueve concejales de la nueva Corporación municipal: los siete de su grupo (PSOE) y los dos de Ciudadanos (Cs) e Izquierda Unida (IU), respectivamente. El nuevo alcalde ofreció “trabajar sin descanso y de forma honesta”, y dijo que “se abre un nuevo tiempo para Alcañiz”. Para el nuevo gobierno serán prioritarios “el comercio, la cultura, el patrimonio y el turismo, que son dos motores de la ciudad, y hay que dinamizarlos”.
La capacidad del salón de plenos del Ayuntamiento se quedó pequeña para la investidura del nuevo alcalde. Varias decenas de personas tuvieron que esperar en el vestíbulo -a algunas hasta les llevaron sillas- ante la imposibilidad de acceder al interior de la sala donde se iba a constituir la nueva Corporación. El momento histórico merecía la pena, porque la ciudad volvería a tener un alcalde socialista después de 30 años (la Alcaldía de Marisol Navarro duró dos: 1987-1989).
El ambiente, calmado durante la formación de la mesa de edad, se desbordó por completo y convirtió en festivo cuando los concejales fueron tomando posesión de su acta. Especialmente efusivo fue el público cuando salieron a la tarima los electos de PSOE e IU, que fueron recibidos con aplausos intensos, bravos y hasta ‘oes’.
Once concejales optaron por la fórmula de la promesa (todos los ediles del PSOE, los dos concejales de Cs e IU, la candidata del PAR y la número 2 del PP), mientras que seis optaron por la fórmula del juramento (cuatro del PP y dos del PAR). La única concejal que prometió la Constitución “por imperativo legal” fue la de IU, María Milián, que, además, arrancó su intervención diciendo: “prometo trabajar por los intereses de la mayoría social, defendiendo la libertad, la igualdad, la dignidad de las personas y desempeñando mis funciones con transparencia y lealtad a la ciudadanía”.
Contabilizados los votos, Ignacio Urquizu fue proclamado alcalde, lo que fue acompañado de una calurosa ovación del público. El alcalde consiguió los nueve votos antes mencionados, mientras que Juan Carlos Gracia Suso, candidato del PP, recibió cinco (los de su grupo). Hubo tres votos en blanco, los de los concejales del PAR.
Una vez asegurada la Alcaldía, el regidor se dirigió al público en un discurso en el que ni se olvidó de sus predecesores en el cargo ni de la historia de la ciudad, que repasó brevemente comenzando por el siglo XII y acabando en el siglo XX.
El nuevo alcalde tendió la mano a todas las formaciones políticas representadas en el Pleno. “Este Gobierno actuará conforme a sus ideas, a su programa electoral y a sus valores, pero también tiene como proyecto político la voluntad de incorporar a la toma de decisiones el resto de visiones que se aporten lealmente desde otros posicionamientos políticos, logrando los mayores apoyos posibles”, dijo Urquizu, que prometió “consenso y diálogo”, como también “entendimiento fructífero con las distintas asociaciones de la ciudad y los agentes sociales”.
Tuvo también el primer edil palabras para los afectados por el desprendimiento del cerro de Pui Pinos. “Ellos serán los primeros ciudadanos a los que recibiré y a su lado estaremos hasta que resolvamos la situación”, prometió.
Otra de sus lineas de trabajo será la creación de empleo, y para ello pidió la ayuda tanto de las organizaciones empresariales como de los sindicatos. “Dar seguridad a los emprendedores y generar empleos de calidad serán los dos principios que regirán nuestras actuaciones”, apuntó, para, a continuación, hacer hincapié en que el nuevo gobierno de Alcañiz no sólo atenderá a los grandes problemas, sino también a los pequeños: “limpieza de calles, cuidado y embellecimiento de nuestro casco histórico, arreglo de aceras”, enumeró.
Más allá del PSOE
El alcalde se comprometió ante un salón de plenos abarrotado a “abrir un tiempo nuevo, un punto de inflexión en la forma de hacer política” y anunció que su voluntad es el establecimiento de un estilo de gobierno “que responda a las expectativas de cercanía, empatía, participación y proximidad”. No en vano, añadió, “el enorme caudal de apoyo que hemos recibido va más allá de nuestras ideas como Partido Socialista”.
Urquizu -que se despidió con una cita del Quijote que dice “cambiar el mundo, amigo Sancho, no es ni utopía ni locura, es justicia- ofreció “concordia y diálogo” en base a “una voluntad popular” que ha querido “una corporación plural con cinco grupos municipales, donde nadie tiene mayoría absoluta”. Aunque el candidato sí la consiguió ayer con el respaldo de Cs y de IU, a los que, sorprendentemente, no mencionó en su discurso oficial. Sí lo hizo después a preguntas de los medios de comunicación. Con Cs e IU, dijo ante los periodistas, “hubo lealtad desde el primer momento y ambos nos transmitieron un mensaje que hemos valorado, que debía ser el alcalde porque había ganado las elecciones”, manifestó.
“Los 7 pecados capitales”
Todas las miradas estuvieron centradas en el nuevo Alcalde, por el cambio que representa Urquizu después de ocho años de gobierno del PP con Juan Carlos Gracia a la cabeza. Sin embargo, nadie podía dejar de hablar de los tres concejales del PAR, que terminaron votando en blanco tras una semana en la que los aragonesistas hicieron malabares a izquierda y derecha y se quedaron al final sin nada.
Lo que ha ocurrido en las negociaciones entre PP, PAR y Cs lo desveló, ya sin tapujos, el concejal del PP y exalcalde, Juan Carlos Gracia, que se despachó a gusto tras haber sufrido los 15 peores días de su vida política, al ser vetado por los aragonesistas para la Alcaldía en público y en privado como concejal.
Gracia reconoció que intentó propiciar un acuerdo de “centro derecha”, porque el tripartito PP, PAR y Cs “había ganado en el 90% de las urnas de Alcañiz”. Dijo que su partido “no puso trabas ni vetos a nadie”. Según Gracia, “el PAR estuvo de acuerdo en hacer un acuerdo de centro derecha, y también tuvimos conversaciones con Cs, porque estaban también de acuerdo”. Según el exalcalde, que negoció con Cs y PAR en persona, “vimos a través de los medios de comunicación que el PAR se postulaba para la Alcaldía, a lo que nosotros no teníamos ningún problema, como si se hubiera postulado Cs, porque lo importante era la ideología y el proyecto de ciudad”, dijo.
Dolido por los vetos en público y en privado, Gracia Suso declaró que “los que vetaban han acabado vetados; empezó vetando un partido y al final parece que Cs sí vetaba al PAR, porque en un acuerdo de centro derecha se tenía que respetar a la lista más votada. Al final, los siete pecados capitales han caído con contundencia en Alcañiz”, concluyó en clara referencia a los aragonesistas.
El exalcalde alcañizano también tuvo palabras positivas para el nuevo regidor: “creo que lo puede hacer bien; cualquier persona con cierta preparación puede hacer un buen equipo de trabajo y le deseo los mejores éxitos, porque soy profundamente alcañizano y quiero a esta gran ciudad”. Prometió que su grupo hará “una oposición constructiva” los próximos cuatro años.
El PAR
En el PAR parecen tener intención de darle la vuelta a la situación. “Creo que las cosas se tienen que reconducir para sumar todos los partidos”, dijo la candidata del PAR, Berta Zapater, quien, no obstante, achacó al candidato socialista y ya alcalde la responsabilidad de que las negociaciones se rompieran: “el señor Urquizu no ha empezado con buen pie y no ha intentado aglutinar al mayor número de personas”, afirmó la aragonesista, quien opinó que Urquizu “se precipitó” al anunciar el viernes un acuerdo con Cs.
Con todo, dijo que “a lo largo de estos días o de esta legislatura creemos que va a intentar contar con la opinión de los 17 concejales, que estamos aquí para trabajar por Alcañiz”.
En cualquier caso, el PAR de Alcañiz “no se arrepiente de nada”, porque “los plazos y los procesos son los que decidió el PSOE, porque el viernes hubiéramos llegado a un acuerdo”, calculó Zapater. La edil apostilló que “se reconducirá, porque esta ciudad necesita el mayor número de personas para trabajar”, aunque el alcalde “ha de decidirse con quién quiere gobernar”. El PAR ahora mismo “está en la oposición”, sentenció.
El candidato de Cs declaró que la actual “es una nueva etapa en la que podremos decidir los intereses de los alcañizanos”. Se mostró convencido de que la decisión de Cs ha sido la correcta, porque “la Alcaldía debía de ser para la lista más votada”.
En cuanto a la candidata de IU, María Milián, destacó que han apoyado la investidura de Urquizu sin contraprestaciones, pero que “esperamos negociar nuestros puntos de programa para ver si podemos llegar a una buena sintonía”. Añadió que “si sacamos adelante las medidas que planteamos, entraremos en el gobierno”.