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El Matarraña lanza un plan para reciclar la mitad de la basura de la comarca El Matarraña lanza un plan para reciclar la mitad de la basura de la comarca
Material explicativo de la Comarca del Matarraña sobre el plan Porta a Porta

El Matarraña lanza un plan para reciclar la mitad de la basura de la comarca

El plan Porta a Porta pretende aumentar del 20 al 50 por ciento el porcentaje de residuos que se reutilizan
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La Comarca del Matarraña, en Teruel, ha puesto en marcha un plan pionero en Aragón que, bajo el nombre Porta a Porta, pretende aumentar del 20 al 50 por ciento la basura que se recicla en la comarca y adelantarse así a la normativa europea que establece esta obligación para 2020.

"Ahora todo el mundo habla del ICA" -el Impuesto de Contaminación de las Aguas-, advierte el consejero de Territorio y vicepresidente de la Comarca del Matarraña, Francisco Esteve, pero pronto se convertirá en un problema cumplir con la obligación que establece la directiva europea de reciclar el cincuenta por ciento de la basura.

La comarca del Matarraña es un territorio dedicado fundamentalmente a la agricultura y ganadería -con ciertos problemas de contaminación que generan los purines-, y también al turismo, por lo que creen que el modelo al que deben dirigirse debe ser sostenible.

Basado en experiencias en el País Vasco y Cataluña, la primera fase piloto está previsto que se ponga en marcha el próximo mes de mayo, según explica a Efe Esteve.

Se aplicará en cuatro pueblos -Fuentespalda, Monroyo, Torre de Arcas y Peñarroya de Tastavins-, sobre una población total de 1.200 habitantes. De este modo se testará un programa que deberá extenderse a 8.500 vecinos y que establecerá la recogida en las puertas de cada vivienda, según un calendario establecido de días y horas para cada fracción.

Además, incorporan también el reciclaje de materia orgánica que no se realiza actualmente, con el objetivo de realizar el compostaje de este material en la planta de depuración de purines construida en Peñarroya de Tastavins, actualmente en desuso.

Esteve reconoce que la puesta en marcha del plan supone, a corto plazo, un mayor esfuerzo económico y también de concienciación de los vecinos pero el objetivo es buscar un modelo "sostenible medioambiental y económicamente" porque cree que a medio plazo se encarecerá mucho el reciclaje con la necesidad de construir cada vez vertederos y plantas más grandes.

También destaca que este sistema mejorará mucho el reciclaje en origen de tal manera que la fracción de lo que se consideran impropios, es decir, residuos que no están en su contenedor correspondiente, se reducirá.

Y es que esto actualmente genera también problemas, explica Esteve, cuando se traslada la basura en camiones a las plantas específicas: "Si llegamos con un camión de cartón en el que aparecen muchos impropios lo pueden rechazar".

La comarca ha repartido contenedores especiales entre los vecinos que participan en el plan piloto, que comenzará en mayo cuando se espera que estén disponibles los vehículos especiales, más pequeños, que la administración ha tenido que adquirir para "callejear" por los municipios.

Están reforzando además la sensibilización con charlas para todos los públicos y talleres para los más pequeños donde explican, por ejemplo, el proceso del compostaje.

Utilizan también las nuevas tecnologías para resolver dudas y mejorar la comunicación con los vecinos, que tendrán que asumir un esfuerzo inicial para ser responsables y sacar la basura a las horas convenidas y del tipo que se determina.

"La gente pregunta mucho, tiene dudas", reconoce Esteve pero "poco a poco se conciencian" de que el esfuerzo merecerá la pena, asegura.

Y es que, según las experiencias que han estudiado durante los últimos tres años, en municipios con un número de habitantes similar a la comarca o mayores, el reciclaje es posible y rentable.

Recuerda que, actualmente la comarca recicla el 20 por ciento de la basura que genera, y esto supone un ingreso de unos 100.000 euros al año, cantidad que aumentará a medida que lo haga el reciclaje, que en primera instancia esperan que alcance el 50 por ciento para cumplir la normativa, pero conocen zonas en las que han alcanzado el 80 por ciento.