El Gobierno de Aragón reconoce que los plazos del hospital de Alcañiz corren peligro
La consejera de Sanidad, preocupada por la “lentitud asombrosa” de la UTELas obras del hospital de Alcañiz podrían demorarse más allá de diciembre de 2021, plazo que fija el contrato entre el Gobierno de Aragón y la UTE OHL-Dragados, una sociedad que mantiene una “lentitud asombrosa” en la ejecución durante los últimos meses. Así se expresó en las Cortes de Aragón la consejera de Sanidad, Pilar Ventura, quien confesó estar “muy preocupada” por el probable retraso en el estreno del nuevo equipamiento.
La consejera compareció en la Comisión de Hacienda de la Cámara regional para presentar el presupuesto de su departamento para 2020, que crece un 3,62% hasta los 2.072 millones de euros, de los que 22,2 van destinados al plurianual del hospital de Alcañiz y 32,2 para el del hospital de Teruel capital. El apartado de inversiones global asciende a 57,7 millones.
Porque considera que los dos hospitales son “necesarios para la población” turolense, el Departamento “hace un esfuerzo tremendo” y el área “cumple todas las obligaciones que tiene que cumplir, que es licitar un contrato con unos plazos de ejecución y eso conlleva unos plurianuales que tienen que figurar cada año, los gaste o no”, detalló Ventura, quien achacó toda la responsabilidad del escaso ritmo de ejecución del centro hospitalario bajoaragonés –un 10% cuando a estas alturas debería situarse en el 40%– a las empresas concesionarias, pues “desde el Gobierno de Aragón no les ponemos ningún impedimento para que realicen la edificación”.
La consejera apuntó que la dirección de obra “nos está avisando de que puede verse en cuestión la viabilidad técnica de terminar el hospital en su fecha”, por lo que el facultativo está requiriendo a la constructora “que ponga inmediatamente todos los recursos humanos y materiales para hacer posible el plazo de ejecución” firmado.
Ventura reiteró que desde la Administración “no se puede hacer otra cosa” que “tener el presupuesto, adjudicarlo a quien a sabiendas hizo la oferta económica más baja pero sin llegar a ser temeraria” y esperar a que se ejecute. “No puedo aventurar cuál es el interés de la empresa en no construir, pero lo cierto es que va de una lentitud asombrosa”, enfatizó. Por lo tanto, “estoy muy preocupada”, enfatizó, como lo están “todos en el Gobierno”, concluyó.
La consejera levantó las quejas de la oposición (PP, Vox y Cs), que no entiende cómo desde el Gobierno de Aragón no se puede hacer más para presionar a la empresa.
Sanidad empieza a sopesar la solución drástica de cancelar el contrato –una solución que daría al traste con el plazo marcado definitivamente–, máxime cuando la dirección de obra ha hecho saber al departamento que la UTE ha presentado un modificado con el objetivo de ahorrarse costes. Una posibilidad que ni siquiera se plantea en el contrato firmado, que asciende a 57,5 millones de euros. En las últimas semanas están trabajando menos de una decena de operarios.
El próximo viernes, el diputado del PP y exalcalde de Alcañiz, Juan Carlos Gracia Suso, preguntará a la consejera si tiene previsto ampliar el plazo de ejecución de las obras, mientras que el primer edil actual, Ignacio Urquizu, ha pedido una reunión con la propia Ventura.