Ars&Renovatio analiza uno de los conjuntos pictóricos más relevantes del antiguo Aragón

Las pinturas murales góticas del Castillo de Alcañiz constituyen uno de los conjuntos más importantes de la Corona de Aragón. Sobre los aspectos patrimoniales, históricos, arqueológicos, artísticos y de las nuevas tecnologías para el conocimiento y preservación de estos relevantes vestigios reflexiona la edición número 12 de la revista Ars&Renovatio, editada por el Centro de Estudios de Arte del Renacimiento (CEAR).

El centro adscrito al Instituto de Estudios Turolenses (IET) de la Diputación de Teruel profundiza en el conjunto de interés patrimonial formado por estas pinturas, realizadas entre los siglos XIII y XIV con la técnica a seco y pintura al temple.

La presentación del nuevo volumen tuvo lugar este viernes en el Palacio Ardid de Alcañiz, con la asistencia del concejal delegado de Cultura, Javier Climent; la diputada delegada del Servicio Provincial de Educación de la DPT, Anabel Fernández; la directora del IET, Inmaculada Plaza y la catedrática de Historia del Arte y directora de Ars & Renovatio, Carmen Morte.

La revista es una publicación anual electrónica del CEAR, patrocinada por la DPT, el Ayuntamiento de Alcañiz y la Fundación Quílez Llisterri. “La singularidad del número 12 ha llevado a tomar la decisión de combinar la versión digital con la impresión en papel”, subrayó Fernández. Se han impreso 60 ejemplares.

“Desde su nacimiento en el año 2013, la pretensión de las páginas de Ars & Renovatio ha sido aportar actualizaciones al conocimiento científico del arte desde la Baja Edad Media hasta la Edad Moderna y, particularmente, al arte renacentista, así como difundir las investigaciones y las opiniones de los expertos en estas materias y en otros campos”, indicó la diputada.

Por su parte, Plaza puso en valor la descentralización del IET y aseguró que “la revista es un trabajo excepcional lo mires por donde lo mires: la estética, la calidad de materiales, la fotografía...”. En cuanto al contenido, “son obras rigurosas y muy divulgativas”, destacó.

Nueve artículos monográficos

Por su parte, Morte explicó que las pinturas a punto estuvieron de desaparecer cuando casi derruyen el castillo hace un siglo. “No siempre fueron valoradas”, lamentó. Indicó que la recopilación de los nueve artículos que aparecen en el monográfico surgió en una reunión que el Consejo Científico del CEAR mantuvo en el año 2018, concretamente, de la propuesta del entonces secretario general del IET Javier Sáenz, pero no se ha podido editar hasta el presente año. No obstante, en 2021 sí que se dio a conocer la iniciativa lanzada por Sáenz a través de la publicación de uno de los trabajos que formarían parte de este estudio exhaustivo en el número 9 de la revista.

Dos años después, se decidió publicar el resto de los artículos, firmados por notables autores: las doctoras María del Carmen Lacarra y María Jesús Lacarra, de la Universidad de Zaragoza, que abordan cuestiones artísticas y literarias; el doctor José Ángel Sema, de la Real Academia de la Historia, que habla de un mundo medieval en transformación; el doctor Carlos Laliena, de la Universidad de Zaragoza, que aborda la Orden de Calatrava que tenía encomendado el Castillo; el arqueólogo José Antonio Benavente, que da unas pinceladas de los asentamientos previos a la fortaleza medieval; Álvaro Soler, de la Real Armería, Patrimonio Nacional; Manuel Retuerce, de la Universidad Complutense de Madrid y Ernesto Fernández-Xesta, de la Real Academia Matritense de Heráldica y Genealogía. Incluye un artículo sobre digitalización y modelado tridimensional de los frescos, de Irene Ruiz (Politécnico de Turín) y Gianluca Vita (Politécnico de Milán).

En la web de la Fundación Quílez Llisterri, Teresa Thomson, que cita como fuente principal a la propia María del Carmen Lacarra, explica que la singularidad de las pinturas radica en que la mayoría son de temática civil, lo que las convierte en un referente en el ámbito de la pintura gótica.

Participaron varios artistas por encargo de diversas personalidades entre 1290 y 1375, indica Thomson. “Su profundo sentido narrativo se superpone al estético”, aclara sobre su valor.

El “extraordinario conjunto pictórico se desarrolla en el atrio de la iglesia o planta baja de la torre del Homenaje (...), en el claustro y en diversas zonas de los paramentos exteriores de la zona medieval del castillo”.

En 2002 concluyó un interesante trabajo de restauración de estas pinturas consistente en su limpieza y consolidación, bajo la dirección del Instituto del Patrimonio Histórico Español del Ministerio de Cultura, y del Servicio de Conservación y Restauración del Patrimonio Cultural del Gobierno de Aragón.

Actas de Emblemática.

Ayer se presentaron también las Actas del XIV Congreso Internacional de la Sociedad Española de Emblemática. Humanismo y retórica visual, que tuvo lugar el pasado año.