Arranca el proyecto piloto de compostaje comunitario de Oliete

Una veintena de vecinos de Oliete iniciarán en los próximos días un proyecto piloto de compostaje comunitario para tratar de recuperar y aprovechar al máximo la materia orgánica que en la actualidad vierten a los contenedores tradicionales. 

El compostaje comunitario es un sistema de tratamiento de residuos que implica la participación ciudadana en la gestión de los residuos orgánicos y reporta amplios beneficios ambientales, sociales y económicos, apunta la Comarca Andorra-Sierra de Arcos a través de un comunicado publicado en su página web. 

El objetivo de la iniciativa colectiva es “probar qué aceptación tiene y, si funciona, la idea es replicarla en otros municipios porque Europa está presionando en el tema del reciclado”, explicó la agente de desarrollo comarcal, Gemma Briz. 

Recuperar por ley

Según la Ley 22/2011 de Residuos y suelos contaminados, para el año 2020 debe recuperarse un 50% de la basura generada, y para ello “es necesaria la implicación y mejora de los diferentes métodos de gestión separada de los residuos de materia orgánica, ya que suponen más de la mitad de los residuos no clasificados que se generan en los hogares”, destaca la territorialidad. 

La Comarca ya inició en marzo un proyecto de compostaje doméstico y escolar, y ahora ha llegado el turno del comunitario, que se realizará en Oliete por iniciativa de su Ayuntamiento. 

La diferencia con respecto al compostaje doméstico está en el “carácter colectivo de la participación”. Como ésta es escasa en el caso de este proyecto, tan sólo de unas 20-25 personas, no es necesario llevar la materia orgánica a una planta de compostaje.

Los vecinos, de forma voluntaria y con previo acuerdo de colaboración, depositarán sus biorresiduos domésticos en el compostador. 

El mantenimiento para el correcto proceso de compostaje requerirá el mezclado y aireado de la compostera, así como el riego de la misma, principalmente en verano. 

Pasados entre ocho y doce meses, el compost será retirado, cribado y empleado como abono natural de calidad para los huertos y jardines de los vecinos colaboradores. 

Esta experiencia será común a todos los municipios a medio plazo, lo que no significará que desaparezca el contenedor tradicional, aunque sí se reducirá su peso y se llevará menos cantidad al vertedero. Esto supondrá un ahorro de costes de transporte. 

Para poder desarrollar esta experiencia piloto, la Brigada Comarcal –contratada gracias a una subvención del Inaem– ha montado el sistema de compostaje que aporta el Consorcio de la Agrupación número 7 de Alcañiz, que ha adquirido materiales para todos los municipios que se interesaron por iniciativas similares como la Comarca del Matarraña o el Ayuntamiento de Torrecilla de Alcañiz.

Por parte de la comarca el gasto ha sido mínimo, apenas la compra de unos cubos de basura para la separación de materia orgánica en el hogar. 

También a nivel doméstico

En cuanto a la iniciativa de compostaje doméstico, se ha diseñado para las viviendas que disponen de jardín o huerta, mediante la instalación de un compostador individual en su propio terreno que permite autogestionar la materia orgánica generada en el hogar y en el jardín. En total, participan 15 personas en este proyecto previo al compostaje colectivo, que dará más réditos. 

Expectación vecinal ante la reunión del 30 de mayo

El 30 de mayo, a las 19 horas, habrá una sesión informativa en el ayuntamiento de Oliete para todos los vecinos que quieran participar en esta experiencia de compostaje. 

Allí, un técnico les explicará qué es lo que deben arrojar al cubo de la basura que después irá al compostador para convertirse en abono para los huertos. 

Son compostables los restos de fruta y verdura cruda, cocida o asada (nunca frita); cáscaras de huevo machacadas; arroces y pastas cocidas; yogures y zumos caducados; posos y filtros de café; restos y bolsitas de infusiones (sin grapas); papel de cocina; servilletas de papel; hueveras de cartón y cartón ondulado; tubos de papel higiénico, de aluminio y de papel de cocina; y pan. Los huesos de fruta y las cáscaras de frutos secos es mejor usarlos de biomasa. También son compostables los restos de poda, hierba, cenizas, serrín, fruta caída o paja.

El alcalde de Oliete, Ramiro Alfonso, propuso que los compostadores se abran con llave para que sólo los vecinos que participen en el proyecto los puedan manipular cada vez que tengan que depositar materia orgánica. “Después, la gente que colabora que se lleve el compost para sus huertos”, añadió.

Por el momento, los posibles voluntarios están pendientes de la reunión del jueves, en la que “nos tienen que explicar el proceso y cómo será todo”. Por el momento hay “expectación”, lo cual siempre es importante a la hora de iniciar un proyecto ambicioso como este.