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Andorra-Sierra de Arcos descarta perforar la Sima de San Pedro de Oliete para construir un mirador saliente Andorra-Sierra de Arcos descarta perforar la Sima de San Pedro de Oliete para construir un mirador saliente
Así quedará el mirador, el aparcamiento y demás estructuras planteadas en la memoria valorada. Pablo Chóliz del Junco

Andorra-Sierra de Arcos descarta perforar la Sima de San Pedro de Oliete para construir un mirador saliente

Opta por una estructura de ocho metros en el saliente actual y ahorrar costes
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No habrá que perforar la Sima de San Pedro de Oliete para construir un mirador saliente desde donde observar el interior del pozo troncocónico de 108 metros de profundidad. La Comarca Andorra-Sierra de Arcos sustituirá el cuestionado proyecto por otro con menor impacto ambiental, basado en la reforma de la peligrosa estructura actual. Los cambios llegan también al centro de visitantes, que se ubicará cerca de la carretera, y hay dos mejoras: la conexión por senda entre el abismo kárstico y el poblado íbero de San Pedro, y el reasfaltado de las pistas que dan acceso rodado a ambos enclaves turísticos. Con todo, la institución estima gastar alrededor de un millón de euros, lejos de los 1,6 millones que presupuestaba en origen el proyecto estrella del Plan de Sostenibilidad Turística en Destino de la entidad comarcal.

El consejo comarcal aprobó por unanimidad el pasado lunes encargar la redacción de un proyecto por cada una de las cuatro memorias valoradas –mirador, centro de visitantes, sendero y pista asfaltada–, después de que el pasado mes de julio el Instituto Aragonés de Gestión Ambiental (Inaga) decidiera no someter a procedimiento de evaluación de impacto ambiental ordinario el proyecto de perforación. Sin embargo, sí fijó 18 medidas correctoras que dificultaban sobremanera seguir adelante con el diseño de BAU Estudio de Arquitectura y Urbanismo.

La propuesta planteaba la ejecución de un mirador ubicado en el cráter de la sima. Esta zona iba acompañada de un centro de información, con musealización en la antesala de un túnel de 48 metros de longitud y la anchura suficiente para un paso peatonal de 2 metros de ancho y 2,2 de alto. El mirador iba a ser un balcón volado de 5 metros sobre el vacío, justo enfrente de la estructura  que hoy se emplea por los visitantes, cuyo uso está prohibido por inseguridad geológica.

Presentaron alegaciones al proyecto la Asociación Naturalista de Aragón (Ansar), la Plataforma a favor los Paisajes de Teruel, la Sociedad Española de Ornitología (SEO/Birdlife), Amigos de la Tierra o la Sociedad Española para la Conservación y Estudio de los murciélagos (Secemu), entre otras. Todos advirtieron que el enclave es “excepcional”, único en Europa, y está declarado Lugar de Interés Geológico (LIG), Lugar de Importancia Comunitaria (LIC) y Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA), dentro de la Red Natura 2000.

Reflexión, cambio y ahorro

Tras medio año de reflexión y mucho debate interno, el consejo comarcal echó para atrás el proyecto en otoño y encargó las cuatro memorias valoradas que racionalizan la inversión tras comprobar con detalle las implicaciones constructivas, logísticas,  ambientales y económicas. Buscó vías alternativas con menor impacto, apostando por una mejora sustancial del mirador existente pero manteniendo ligeramente la filosofía del diseño desechado, según explica el ingeniero técnico industrial Pablo Chóliz del Junco, a quien se le encargó el anteproyecto del mirador.

“Optamos por cambiar el gran proyecto por temas de plazo y económicos. Todos los materiales se han revalorizado. Sin embargo, no vamos a dejar de actuar en el entorno de la Sima y el Cabezo de San Pedro porque son dos hitos muy importantes y a futuro van a seguir siéndolo más”, explicó la consejera delegada de Turismo, Inma Moliner, quien se mostró convencida de que el nuevo planteamiento permitirá “pasar un día muy agradable” visitando conjuntamente ambos atractivos turísticos.

“El centro de visitantes regulará todo el flujo de entrada a la sima y hay que poner el valor el cabezo porque se está investigando allí” en las estructuras defensivas de hace 2.300 años, primero con fondos de la Diputación de Teruel y en los próximos meses con financiación comarcal.

Moliner explicó que el proyecto conjunto será financiado principalmente con el Plan de Sostenibilidad Turística, que aportará 925.000 euros, y el resto mediante el presupuesto de la comarca. “Es una prioridad para el plan y tiene que hacerse dentro de sus plazos”. Queda algo más de un año para que concluya.

Croquis del sendero, de algo más de un kilómetro, que unirá el poblado íbero con la sima. Prames

Micropilotes para asegurar

En su memoria valorada, Chóliz del Junco calcula que el nuevo mirador, en el emplazamiento del asomadero actual, costará 150.632,90 euros. Partiendo de las características geológicas desarrolladas en el estudio de Geoscan Consultoría en septiembre de 2021, el ingeniero indica que la sima es un punto “de inmenso valor científico”, pero geotécnicamente “es una fuente de incertidumbres y hándicaps”.

Cualquier solución para un mirador en la cima, apunta, debe estar sustentada en una cimentación basada en micropilotes.

Con respecto al mirador actual, de 1,8 metros de anchura  1,5 metros de vuelo, se mantendrá el pórtico para facilitar el descenso con cuerdas para labores de mantenimiento y usos de investigación y recreativos.

Tras barajar distintas opciones, el técnico propone un voladizo de cajón de chapa de acero que se estreche en la punta –desde los 4 metros a un metro de anchura–, sobresaliendo 8 metros desde la cabeza del talud, con una ligera pendiente ascendente para ir reduciendo el zócalo y aumentar la sensación de exposición según se avance. Se asimilará de alguna forma al mirador de las hoces del río Mijares en San Agustín, diseñado por este autor.

Además, se habilitarían dos aparcamientos en una plataforma superior con capacidad para unas siete plazas. La memoria  estima en siete meses y medio el plazo de ejecución, incluida la redacción del proyecto.

Centro de visitantes y senda

En cuanto al centro de visitantes, será común a la sima y el cabezo de San Pedro y costará 696.911,60 euros con un plazo de ejecución de 15 meses, según el anteproyecto de Siste Arquitectura.

Se ubicará unos 450 metros al norte de la intersección de la carretera A-1401 con la A-1402, a unos 4 kilómetros de Oliete. Se edificará en una planta, será accesible y tendrá dos zonas expositivas, así como recepción, vestuarios y aseos. Al estar separado de la sima, contará con un amplio aparcamiento.

Por su parte, Prames cuantifica en 120.951,60 euros la construcción de un sendero entre la sima y el poblado que permitirá conocer un abrigo con pinturas rupestres, atravesar un barranco mediante un puente colgante y pasear durante 20 minutos con vistas al valle del río Martín. Por último, se reasfaltará la pista de acceso, para lo que habrá que gastar 85.227,32 euros según el arquitecto Emilio Dobato.