Sebastian Alegre, alcalde de Tramacastiel: “El principal problema que tenemos es la comunicación, carreteras e Internet”

Sebastián Alegre Monterde es  alcalde de Tramacastiel desde 2010. Tiene 65 años de edad y está jubilado. Su vida laboral ha transcurrido en la fábrica de Cella.

 -¿Desde cuándo es usted  alcalde de Tramacastiel?

- Soy alcalde de Tramacastiel desde el año 2010 porque el anterior alcalde que había dimitió un año antes de concluir la legislatura y entré de alcalde. Con la presente es la segunda legislatura de acalde. 

-¿Cuántos vecinos tiene Tramacastiel?

-Una cosa es el personal que hay censado en el pueblo, otra los que residen. Hay más  gente  censada que los que viven realmente todo el año en el pueblo. Pero resulta que hay personas que viven a caballo entre Tramacastiel y otros lugares como yo, que cuatro días  vivo en Tramacastiel y tres en Teruel. Censados hay 65 personas. Este municipio también tiene a Mas de la Cabrera.

-¿Con qué servicios cuenta el municipio?

-A nivel del servicio sanitario viene el médico y la farmacia una vez  a la semana. El miércoles está también la secretaría del Ayuntamiento abierta al público. El panadero viene todos los días desde Libros. La asistente social, que está en Libros, viene los miércoles para atender las necesidades del personal. El último día del mes se desplaza a Mas de la Cabrera. Aquí tenemos la problemática de tener la población distribuida en dos localidades. Muchos servicios, por lo tanto, son dobles. El servicio de asistencia a domicilio como otras atenciones caso de agua, basura es doble y sin embargo esto no se entiende muy bien desde Diputación Provincial de Teruel o no se presta la atención debida a los ayuntamientos que tienen los núcleos repartidos. 

-¿Tramacastiel tiene población activa? 

-La mayor parte de la población es personal jubilado. En activo hay personas que se dedican a la construcción pero también son pocos, 5 personas. En ganadería no hay ninguna persona dedicada a esta labor. En agricultura se ha quedado reducida a los huertos familiares.

-¿Cuál es el principal problema que tiene el municipio de Tramacastiel? 

-Actualmente está en funcionamiento un hostal municipal que lo lleva una chica joven y entonces el principal problema que se tiene y que le dicen los que vienen son las comunicaciones. Las comunicaciones a nivel de carretera y las telemáticas, la banda ancha. En telefonía solo está Movistar y funciona bien pero cuando vienen personas de las ciudades a pasar unos días en el hostal no tienen comunicación. La gente está en cierto modo incomunicada porque solo cuenta con una opción, la de Movistar y hay otras opciones. 

En Internet también hay problemas. Por ejemplo, el secretario para hacer sus trabajos, ahora que todo se realiza con las plataformas de la Diputación Provincial, de Comarca, de la DGA o de la Confederación Hidrográfica del Júcar. Todo se hace a través de Internet. Un Internet que va muy lento. Cuesta mucho hacer este tipo de trabajo con un medio en precario. 

-¿Por dónde pasa el futuro de Tramacastiel? 

-El futuro inmediato es complicado, pero la experiencia que tenemos con el hostal municipal el futuro pasa por el turismo. Es un municipio que oferta patrimonio, relax y descanso para la gente de la ciudad. Por esto es muy importante que estén bien las comunicaciones. Una de ellas es la comunicación con Madrid. El primer enfoque de actuación sería la carretera nacional 330, que se mejore, que se repare y sin descartar para nada la autovía 43.  Pero una autovía que tiene que pasar por la zona porque tiene trazados diferentes. No nos serviría para nada a los pueblos de la Ribera del Turia y del Rincón de Ademuz si la autovía sale a Cella para comunicar con la A-23. Nosotros reivindicamos la N-330 para que los pueblos estén comunicados y sin problemas de seguridad en el tráfico con Teruel. Tampoco descartamos la A-43. La gente de Madrid tiene que tener facilidad de llegada para el turismo en esta zona. 

Otra posibilidad son las propuestas de la Diputación Provincial de Teruel con el 113. Es decir, que en las cabeceras de las comarcas hubiese núcleos de empresas con dinero público. Lo que no podemos pedir es que en cada municipio nos monten una fábrica, pero sí en las cabeceras de comarcas. Si en las cabeceras de comarca hubiese una empresa que ofertara puestos de trabajo para los pueblos de alrededor se daría una salida a los pueblos, porque a cada persona le gusta realmente vivir en los pueblos que han nacido y mantener sus entornos aunque se tengan que hacer pequeños desplazamientos. Esta línea de trabajo del proyecto113 que plantea la Diputación Provincial de Teruel podría ser una salida para zonas como ésta, de la de los pueblos  de la Ribera del Turia.