La ceramista María Antonia Zamora expone ‘Ítaca’ en Monreal del Campo

La ceramista y escultora María Antonia Zamora, ganadora del Certamen José Lapayese Bruna 2017, expondrá Ítaca en una muestra que se inaugurará en la Casa de Cultura de Monreal del Campo a partir de las 19 horas de este sábado, y que podrá visitarse hasta el 6 de octubre. 

El trabajo de la ceramista podrá contemplarse en la localidad del Jiloca en virtud del primer premio que obtuvo en el certamen de arte organizado por el Centro de Estudios del Jiloca, que cumple veinte años. 

Ítaca es una exposición de cerámica creativa en la que se pone de manifiesto una de las constantes de la autora, que busca siempre que el mensaje de su obra trascienda al barro y se manifieste en los espacios vacíos entre las paredes, en las formas caprichosas y poco compactas, que tratan de elevar la escultura a una categoría etérea en referencia a lo inmaterial, a los sentimientos y las sensaciones. 

Más allá de lo evidente, de la patria legendaria de Ulises o de la residencia del propio Homero, según algunos historiadores, Ítaca se define como punto de inicio y de final de un proceso por antonomasia. En su serie escultórica, María Antonia Zamora toma de la isla griega la idea de sabiduría, de lo que media en el viaje que media entre ese inicio y ese final, de las metas y los fracasos que se suceden, siempre desde una perspectiva positiva de desarrollo personal. 

El camino

Según palabras de la autora, “Ítaca no es donde llegamos, no es el destino soñado, no es el paraíso en el que detenerse. Ítaca es el camino, el viaje que emprendemos a lo largo de los años, el recorrido vital de aciertos y fracasos en la búsqueda de los sueños”. “En ese lugar donde rompen las olas, donde la vida se escapa o amanece, emprendiendo el viaje sin retorno hacia la libertad o la muerte, sintiendo que lo importante es el camino y lo que aprendemos mientras lo recorremos”. 

A través de varías piezas estéticamente heterogéneas, la ganadora del José Lapayese reflexiona sobre la idea del viaje proactivo de la vida: “El camino enseña si lo miras, si lo reflexionas, si lo vives con intensidad, si lo sientes activo y distinto, si lo eliges sin todas las certezas, con los riesgos de equivocarte, si te llena de futuro gracias a que has caminado por su pasado. Debemos inventar y renovar nuestras Ítacas, siempre hay que buscar el sueño siguiente, porque sin esta constante búsqueda estamos abocados a ir a la deriva y naufragar”.

María Antonia Zamora bautiza cada una de sus piezas incluidas en esta serie como Ítacas por sí mismas, “gritos callados como si fueran la espuma del agua, que siguen la estela de los murmullos de libertad, oídos o imaginados en paraísos que no son lejanos, sino más cercanos e íntimos de lo que reconocemos”.

Con maestría y querencia hacia la experimentación, la ceramista juega y se recrea con la materia, el color, la luz y la sombra que llena y define su creación, apelando siempre a esa idea de viaje, que además de proactivo y enriquecedor es necesariamente “interior e intimista”. 

La serie Ítaca se compone por piezas que a su vez han formado parte de otras series, como Mangata, Winter, realizada con porcelana y papel clay o Gravity, en gres. 

La exposición podrá verse en la Casa de Cultura de Monreal del Campo hasta el  próximo 6 de octubre.