Pesimismo en la industria del aceite por la caída del 20% en los precios del producto
Los productores se citan en Calaceite con motivo de la feria monográficaLa Feria del Olivo y del Aceite de Calaceite ha llegado a su 31ª edición este fin de semana con el sector oleícola en horas bajas. Los precios del aceite han sufrido una caída en picado que ronda ya el 20% en apenas dos meses, una pérdida de valor relevante para uno de los productos más importantes de la industria agroalimentaria bajoaragonesa que unos achacan a la especulación y otros a una combinación entre ésta y la ley de la oferta y la demanda. Ambas operan con mano de hierro.
Si hace apenas dos meses el aceite de oliva de mejor calidad -virgen extra- se cotizaba en el mercado nacional a 3,60 y 3,70 euros el kilo, hoy lo hace ligeramente por encima de los tres euros el kilo. Y si observamos el aceite de oliva virgen, éste ha bajado hasta los 2,75 euros el kilo esta semana, mientras que el de oliva lampante no se paga a más de 2,58 euros por kilo.
Como era de esperar, este descenso en picado de los precios del aceite español era tema de conversación en la feria que ayer reunió en Calaceite a almazareros y agricultores del Matarraña y Bajo Aragón. En el stand de la cooperativa Aceites del Matarraña, los miembros de la Junta Rectora Jacinto Roig y Joaquín Monclús y el encargado de la almazara Nacho Gasulla señalaban con visible pesadumbre que "en este momento no hay ni compradores, y los que hay quieren el aceite regalado, mientras que a otros hasta les da vergüenza ofrecer estos precios, porque estamos por debajo de costes", aseguraban.
La situación de los precios ha dado un vuelco en dos meses de una manera inesperada, y lo que ha provocado el cambio es la lluvia, de la que los especuladores han echado mano como escusa para dejar de comprar.
La lluvia y la especulación
Los litros caídos en las últimas semanas -74 en Calaceite, según los miembros de la cooperativa- han dado un respiro al campo, y además lo han hecho en un momento propicio para el olivar, en plena primavera. De la misma manera, los compradores de aceite han valorado que la lluvia traerá una mejor cosecha en España el año que viene. "Eso, unido con que se va a llegar sobradamente al enlace de la campaña siguiente, ha hecho que se deje de comprar aceite", comentó el almazarero José Gabriel Alcober, de Valdeltormo, quien resumió la situación señalando que "el sector es miedica y está descontando que sobrará aceite".
Por su parte, desde la cooperativa de Calaceite recordaron que el aceite turco y tunecino, que se vende a mucho menor precio, "ha paralizado las ventas en España". Según Roig y Monclús, "el precio ha bajado y tenemos a Andalucía con muchísimo aceite almacenado que quieren vender, cuando el mercado está totalmente saturado".
En todo el país hay aceite almacenado, según los cooperativistas, porque “nos marcamos unos objetivos para este año que al final no se han cumplido", y ahora el aceite está barato y sin vender.
A esta situación se añade que el Sistema de información de los precios en España (Poolred) queda establecido por las compras y ventas que se realizan semanalmente, y aunque haya una sola venta de aceite, ésa será la que determinará el precio semanal. Eso significa que, ante el nerviosismo que se ha instalado en el sector almazarero, solo que una almazara venda una partida de aceite en todo el país en una semana, esta venta determinará los precios de partida.
“No perder los nervios”
El almazarero José Gabriel Alcober abogó por "no ponerse nervioso ahora que los precios están tan bajos", ya que "las lluvias ayudarán a que haya cosecha, pero, sobre todo, si continúan en los próximos meses, porque antes que nada hay que ver cómo sale la floración en Andalucía", que es la comunidad autónoma con mayor producción del país.
Una mala floración andaluza provocaría un alza en los precios del aceite y al contrario si el fruto no cuaja al final de la primavera. Para Alcober, "el aceite virgen extra se puede vender todavía a 3,20 euros, pero podemos esperar aún unos meses más, porque estoy convencido que podremos vender cerca de como estuvo en plena campaña". El almazarero reconoció que "ha entrado aceite de Grecia y Turquía, que han comprado los italianos, pero esto", añadió, "sucede siempre, y provoca que los precios en España se desplomen", lo cual "es un juego especulativo y de psicología; quien no aguanta, vende a bajos precios, y después el precio sube". A su juicio, "las cooperativas deberían aguantar y no malvender el aceite".
En cualquier caso, la situación actual es de incertidumbre, en todo el sector, porque quien tiene el aceite almacenado no sabe en este momento "hacia donde tirará el mercado", aunque Alcober confió en que "los precios se podrán recuperar". No en vano, "hemos tenido la misma producción en España este año que el pasado, razón suficiente para que no nos pongamos nerviosos", dijo.