Los Estados podrán ampliar las ayudas a los jóvenes agricultores hasta el 50 por ciento
El reglamento Ómnibus plantea una seria de mejoras técnicas para simplificar el repartoLos países de la Unión Europea (UE) y la Eurocámara llegaron esta semana a un acuerdo sobre el llamado reglamento Ómnibus, que plantea una serie de “mejoras técnicas” en la Política Agraria Común (PAC) en materia de pagos directos, desarrollo rural y organización común de mercado, entre otros aspectos. Además, las subvenciones adicionales a los jóvenes podrán ser hasta un máximo del 50 por ciento superiores a la ayuda básica, frente al 25 por ciento actual, y desaparecerán los limites mínimo y máximo de hectáreas por explotación.
Estos cambios recibieron el visto bueno del pleno de la Eurocámara -con 503 votos a favor, 87 en contra y 12 abstenciones- y posteriormente fueron ratificados por los ministros de Agricultura y Pesca de la Unión Europea. Se trata de una serie de modificaciones legislativas planteadas por la Comisión Europea (CE), que buscan simplificar las políticas europeas, entre ellas la PAC.
El acuerdo, relativo a la revisión intermedia del Marco Financiero Plurianual 2014-2010, tiene que confirmarse en una comisión especial de Agricultura en el Parlamento Europeo (PE) mañana lunes, 16 de octubre.
“Prometimos un acuerdo rápido sobre las nuevas normas que harán más fáciles las vidas de los agricultores europeos. Hoy me satisface anunciar que hemos cumplido nuestra promesa y las provisiones agrícolas del reglamento Ómnibus entrarán en vigor el 1 de enero de 2018 (tras su publicación en el Diario Oficial de la UE)”, señaló en un comunicado el ministro de Agricultura de Estonia, Tarmo Tamm, que ostenta la presidencia de turno de la UE hasta que finalice el año.
En el caso de la agricultura, la reforma indice sobre los cuatro reglamentos que componen la PAC (pagos directos, desarrollo rural, organización común de mercados y regulación horizontal) con el objetivo de simplificar estas normas.
Así, además de dar más flexibilidad a los Estados miembros para aplicar los criterios sobre pastos permanentes, los cambios también convierten en opcional aplicar la figura de agricultor activo para conceder ayudas de la PAC. Además, se refuerza el control de la actividad agraria, que como mínimo se deberá realizar anualmente en todas las parcelas de la explotación por las que se solicite ayuda.
Relevo generacional
Las subvenciones adicionales a los jóvenes podrán ser hasta un máximo del 50 por ciento superiores a la ayuda básica, frente al 25 por ciento actual, y desaparecerán los limites mínimo y máximo de hectáreas por explotación, recoge el comunicado.
Con respecto a las ayudas asociadas a los ganaderos, y en coherencia con la estrategia general de la PAC en busca de un impulso y apoyo al relevo generacional en el campo, se flexibilizarán las condiciones requeridas en los cambios de titularidad de las explotaciones ganaderas cuando el nuevo titular sea un joven agricultor.
Por otro lado, se permitirá a las organizaciones agrarias planificar la producción y negociar contratos de suministro en nombre de sus miembros. La negociación colectiva sólo estaba autorizada en algunos sectores, como la leche, el aceite de oliva, la carne de ternera y los cereales.
El acuerdo alcanzado entre las instituciones comunitarias prevé además la puesta en marcha de una herramienta de estabilización de rentas específica para sectores, que se activará cuando los ingresos de los productores caigan más de un 20 por ciento con respecto a su media anual. El instrumento general de estabilización de rentas se seguirá activando cuando esta caída sea superior al 30 por ciento.
Además, las instituciones de la UE rechazaron la propuesta de la Comisión Europea de eliminar la “regla 50/50” de reparto de los pagos irregulares no recuperables, de forma que los Estados miembros y el presupuesto comunitario seguirán compartiendo en el mismo grado las consecuencias económicas.
La eurodiputada del PP Esther Herranz calificó en un comunicado de “muy satisfactorio” el acuerdo político alcanzado entre el Consejo y el Parlamento Europeo (PE), que recoge “gran parte de las reivindicaciones españolas”.
Entre ellas, citó el aumento de las ayudas a los jóvenes agricultores y el fin de las penalizaciones a los ganaderos de las zonas de dehesa.
En la negociación, España pedía un mayor reconocimiento del uso y aprovechamiento de los pastos leñosos -presentes en ecosistemas como las dehesas- para mejorar así los coeficientes de admisibilidad, determinantes en la percepción de ayudas.
Según Herranz, este acuerdo tendrá en cuenta la realidad de los pastos mediterráneos, que se diferencian claramente de las tierras con predominio de plantas herbáceas.
“El cálculo de las ayudas a los pastos mediterráneos, a los que se les tiene que reconocer su gran valor medioambiental, se encontraba distorsionado por la definición en vigor, más ajustada a los pastos de las regiones del norte de Europea”, explicó la eurodiputada.
Herranz destacó, por otra parte, que se ha logrado aumentar sustancialmente las ayudas directas para los jóvenes agricultores, con el objetivo de apoyar el relevo generacional en el sector agrícola.
Respecto al sector del vino, Esther Herranz también destacó que el reglamento Ómnibus, que entrará en vigor el próximo 1 de enero, introduce “importantes mejoras en relación con la gestión de las autorizaciones de plantación”, como solicitaba España.
Olona: "No resuelve los problemas de fondo"
El consejero de Desarrollo Rural y Sostenibilidad del Gobierno de Aragón, Joaquín Olona, ha considerado que el Reglamento Ominibus recién aprobado por el Parlamento Europeo “tan solo plantea ajustes técnicos que difícilmente van a resolver los graves problemas de fondo asociados a una aplicación injusta e ineficaz de la PAC vigente”.
“No es ni mucho menos la reforma intermedia que debería haberse hecho. Este Reglamento Ómnibus en absoluto merece que se le otorgue el calificativo de reforma porque, de hecho, en ningún momento de su desarrollo ha pretendido serlo con independencia de lo que ahora quiera decirse”.
“Consecuentemente solo cabe esperar, al menos en Aragón, ajustes puntuales que no van a corregir en absoluto los problemas de fondo que se traducen en el tratamiento tan injusto y desfavorable del que son objeto, en particular, la ganadería extensiva, los agricultores y ganaderos más dependientes de la agricultura y de la ganadería así como los jóvenes que se incorporan al sector”, asevera Olona.
Por el contrario, el consejero valora positivamente la comunicación de la Comisión Europea COM(2017)713 sobre el futuro de los alimentos y la agricultura. “La comunicación es un buen punto de partida para abordar la deuda pendiente de la PAC con los agricultores: equiparar sus rentas con las del resto de los ciudadanos tal y como manda el propio Tratado de Funcionamiento de la UE”.
La Comunicación abre una oportunidad para focalizar la PAC en los agricultores con rentas más dependientes de la agricultura y que más contribuyen a su mejora en la medida, en palabras de Olona. También es una oportunidad para que la PAC incentive y premie la contribución ambiental efectiva y orientada a resultados verificables.