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Los empresarios de Andorra tienen un plan para el emprendimiento para afrontar el cierre de las minas y la térmica

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El monocultivo del carbón en Andorra y comarca ha generado en las últimas décadas un “muy bajo nivel de emprendimiento” y una “falta de cultura emprendedora” en el territorio que, con el cierre del sector minero-eléctrico a la vuelta de la esquina, la Asociación Empresarial de Andorra-Sierra de Arcos y Bajo Martín quiere revertir mediante un proyecto de ayudas a la formación y asistencia técnica a emprendedores que generaría músculo empresarial y dinamizaría el “infrautilizado” Centro de Emprendedores de Andorra. 

El programa pretende que jóvenes titulados universitarios o talentos de Formación Profesional apuesten por desarrollar su idea empresarial en la zona. “Queremos conseguir que, una vez formados, en lugar de hacer su vida profesional en Zaragoza, tengan la oportunidad de volver al territorio e instalarse aquí. Vamos a ponerles todas las facilidades, explicó el presidente de la Asociación Empresarial, Roberto Miguel. 

En concreto, los empresarios han acudido a una convocatoria  de subvenciones de desarrollo local abierta por el Ayuntamiento de Andorra de la que esperan lograr al menos la mitad de la financiación para poner en marcha el programa. 

6.500 euros

El proyecto de emprendimiento está valorado en unos 6.500 euros anuales, entre becas para jóvenes emprendedores (incluye el alquiler de despacho con suministros y cuota de autónomos) y servicio de asesoramiento personalizado, para lo que la Asociación Empresarial ha contratado a una persona.

Los objetivos del proyecto son incentivar el espíritu emprendedor en Andorra-Sierra de Arcos y Bajo Martín, especialmente entre la población joven y más cualificada; empujar a los jóvenes que se han formado fuera a que regresen con proyectos emprendedores y compromiso con su tierra; y potenciar el Centro de Emprendedores como vivero de empresas, haciendo de él una infraestructura de referencia en Aragón. 

El Centro cuenta con seis despachos-vivero y tres naves. En este momento tan solo hay dos emprendedores instalados: un ingeniero agrónomo que apuesta por la “revolución agrícola” y que imparte cursos a agricultores en la sala de comunicaciones del Centro, y un informático dedicado al mantenimiento y montaje de equipos.

En cartera hay un joven emprendedor, el primero que se incorporaría al proyecto de emprendimiento, que enfoca su actividad profesional al desarrollo de aplicaciones para dispositivos móviles y mantenimiento de software para empresas. 

“El programa está contemplado para un máximo de cuatro plazas. Estamos a la espera de las ayudas que podamos recibir para ver cómo lo acabamos articulando”, recalcó Miguel.

La Asociación Empresarial cuenta con el apoyo del IES Pablo Serrano de Andorra y de la Universidad de Zaragoza. Ambas instituciones se comprometen a colaborar y dar difusión de la iniciativa entre su alumnado. 

Además del despacho y de la cuota de autónomos, los emprendedores recibirán asesoramiento empresarial (asesoría personalizada, gestoría básica, mentoring, acompañamiento empresarial). 

Asesoramiento personalizado

Además, el programa incluirá una segunda línea de trabajo para la pequeña empresa a nivel general que incluirá también un servicio de asesoramiento personalizado enfocado a las nuevas tecnologías de la información y la comunicación aplicadas a la gestión empresarial. Se contará con una empresa de consultoría que realizará un diagnóstico previo y posteriores propuestas de mejora en herramientas TIC; web, redes sociales y márqueting online; y comercio electrónico, aplicaciones para teléfonos inteligentes y otras herramientas. 

La Asociación Empresarial pondrá a disposición los medios y el personal necesario para la realización del proyecto y recurrirá a contratación de expertos. También gastará recursos en imprenta o anuncios en prensa a efectos de dar a conocer y promover la participación. 

Cabe recordar que la Asociación Empresarial gestiona desde el verano pasado el Centro de Emprendedores. Confía en que algún empresario del sector agroalimentario ocupe una de las tres naves, fruto de las charlas y cursos que se están enfocando hacia este sector. 

El Centro pertenece a la Red Aragonesa de Centros de Emprendedores (Arce), una plataforma común para todos los emprendedores de la región “para que la comunicación entre ellos sea constante”, explicó Miguel.