El lío del cartel de Castelserás: La DGA dice que lo retirará y la Falange asegura que el edificio es suyo
El cartel de Falange Española que fue repuesto el pasado domingo por un desconocido en el balcón del antiguo centro social de Castelserás volverá a ser retirado, según informaron fuentes del Gobierno de Aragón, que confirmaron que la propiedad del inmueble corresponde únicamente a la Administración autonómica, a la que el Estado cedió la titularidad en la época democrática.
Falange, que se atribuyó derechos de propiedad sobre el edificio a través de un comunicado, fue, según las mismas fuentes de la DGA, únicamente una organización a la que se le cedió el uso del inmueble en un momento determinado (presumiblemente durante la dictadura franquista).
En la actualidad existe una única propietaria del inmueble y ésta es la Administración autonómica, corroboraron desde el Ejecutivo aragonés.
Para evitar situaciones como la de esta semana -cuando un desconocido repuso, restaurado, en el balcón del edificio el rótulo de Falange Española que el 22 de mayo había retirado un funcionario del servicio de Patrimonio de la DGA- fuentes del Gobierno precisaron que se recuperarán las llaves del edificio y se procederá a reclamar la propiedad para, a continuación, subastarlo.
Fuentes del Ejecutivo no pudieron precisar cuándo se procederá al remate de la casa y de todo su contenido, aunque podría tardar “no mucho tiempo, unos dos o tres meses”, añadieron.
Comunicado de Falange
Por su parte, los servicios jurídicos de Falange Española y de las Jons aseguraron, a través de un comunicado enviado a este periódico, que el edificio de Castelserás fue adquirido por los falangistas del pueblo en 1944, habiendo “sido desde entonces sede, almacén y punto de encuentro de los falangistas de la comarca, incluyendo sus actividades sindicales y políticas. Esas actividades nunca han dejado de realizarse en el edificio, por lo que es falso que el edificio estuviera abandonado”, dicen textualmente en el comunicado y aseguran que este extremo puede ser corroborado por cualquier vecino, aunque no aportan ningún tipo de certificado.
La Falange añade que el cartel que se retiró el 22 de mayo y que el pasado domingo reapareció en el balcón del edificio tras ser restaurado, es el de Falange Española de las Jons, “organización que ocupa ese edificio como sede y almacén desde 1976 (que es desde cuando se colocó ese cartel en el balcón, pues el anterior estaba deteriorado) hasta la actualidad de forma ininterrumpida, habiéndose encargado siempre de su mantenimiento, como demuestra el hecho de que quien tiene la llave del edificio es un falangista de Castelserás”.
La Falange acusa al Gobierno de Aragón de haber “engañado” a esta persona para que abriera la puerta para retirar el polémico cartel, y lo aducen como razón “por la que ha sido repuesto al lugar que corresponde”.
Denuncia la organización que el Gobierno de Aragón y el Ayuntamiento pretenden apropiarse de “un edificio que es únicamente de los falangistas, no suyo”.
El comunicado incide en que el edificio “ha sido siempre y seguirá siendo de sus legítimos ocupantes, los falangistas de Castelserás” y advierte de que la Falange hará todo lo que esté en su mano para “que eso siga siendo así y ninguna institución pública o privada pretenda apropiarse de lo que no es suyo”.