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Andorra rendirá homenaje a Ángel Alcalá, uno de sus hijos predilectos

Ángel Alcalá, durante la presentación de sus dos últimos libros en la Casa de Cultura Andorra, en 2015

La localidad de Andorra, a través de su ayuntamiento y del Centro de Estudios Locales de Andorra (Celan), con la colaboración de la Diputación Provincial de Teruel, rendirá este fin de semana un homenaje a Ángel Alcalá

La localidad de Andorra, a través de su ayuntamiento y del Centro de Estudios Locales de Andorra (Celan), con la colaboración de la Diputación Provincial de Teruel, rendirá este fin de semana un homenaje a Ángel Alcalá, uno de sus hijos más ilustres, catedrático de Literatura Española en la Brooklin College de Nueva York, Catedrático Emérito de Filosofía por la Universidad de Salamanca y autor de más de veinte libros y unos cincuenta artículos sobre teología, filosofía, historia y política.

El acto tendrá lugar durante la mañana del sábado, 1 de octubre, en el nuevo espacio escénico de la Casa de Cultura de Andorra. Comenzará a partir de las 11.00 horas con la presentación de un libro publicado por el Celan con textos de varios autores que plasman su rica y prolífica trayectora profesional como humanista. A continuación, en torno a las 11.30 horas, tendrá lugar una mesa redonda con diferentes profesionales que debatirán sobre los variados ámbitos de trabajo del ilustre andorrano, que abarcan desde la teología a la música, pasando por el ensayo o la figura de varias personalidades históricas de muy diferentes periodos.

A partir de las 12.30 horas intervendrá el propio Ángel Alcalá, y para terminar el acto sonará el arpa de una buena amiga suya, María Rosa Calvo Manzano, madrileña catedrática de arpa del Conservatorio Superior de Música de Madrid y solista en excendencia y socia fundadora de la Orquesta Sinfónica de RTVE.

Ángel Alcalá, que un día después de este homenaje cumplirá 88 años, puede presumir de haber tenido una intensa vida ligada íntimamente a la investigación en numerosos campos. Aunque está afincado en Nueva York desde 1962, nunca ha roto sus lazos con Andorra, a la que se siente muy vinculado y visita normalmente varias veces al año. Tanto es así que en una de sus últimas comparecencias en público en la localidad minera, con motivo de la presentación en Andorra de dos de sus últimos libros, aseguró que desde su piso en Nueva York "casi puedo ver a San Macario".

Nacido en Andorra en 1928, estudió en el seminario de Alcorisa y Zaragoza y en las universidades Pontificia de Salamanca y Gregoriana de Roma, además de en las de Heidelberg, Madrid y Nueva York. Obtuvo licenciaturas y doctorados en Teología, Filosofía Pura y Filosofía y Letras, y fue ordenado sacerdote.

En 1953 regresó a la provincia de Teruel donde fue profesor de Historia de España y de Latín en el Instituto Laboral de Alcañiz, además de coadjutor de su parroquia. Fundó el Orfeón Alcañizano a partir del precedente del Coro Parroquial que en 1943 había formado en Andorra, profundizando en otra de sus grandes pasiones que le inculcó su madre, la música.

Tras Alcañiz ejerció la docencia en el Seminario de Zaragoza y en la Universidad Pontificia de Salamanca donde impartió Filosofía. En esta última ciudad, donde residió durante dos años, convivió con Lázaro Carreter, Tierno Galván o Antonio Tovar, entre otras personalidades de las letras y del humanismo.

Tras una crisis religiosa que le llevo a realizar una profunda reflexión sobre la Iglesia abandonó el sacerdocio y, en 1962, se estableció en Nueva York, aprovechando la beca Fullbright que concede el Congreso de los Estados Unidos, y que con más premios Nobel entre sus alumnos que ningún otro programa está considerada una de las más prestigiosas del mundo.

Haciendo gala de una ingente capacidad de trabajo y de una voluntad inquebrantable de crecer intelectualmente, al no tener que pagar matrícula gracias la beca se inscribió en todas las asignaturas y acudió a todos los seminarios especializados que le permitían las veinticuatro horas del día, y se enamoró de un método educativo nuevo para él y de una ciudad de la que, junto a su reivindicada Andorra, siempre se ha mostrado firme admirador. De hecho y a pesar de que trata de visitar su Andorra natal al menos una vez al año, en Nueva York fue donde conoció a su pareja y donde decidió establecerse definitivamente.

En 1963 comenzó a ejercer como profesor de la cátedral de Lengua y Literatura españolas en el Brooklin College de la Universidad de Nueva York, donde trabajó hasta su jubilación en 1998.

Entre las casi innumerables condecoraciones y distinciones destacan las de Comendador de la Orden al Mérito Civil, la Cruz de San Jorge de la Diputación Provincial de Teruel o la Medalla al Mérito Cultural del Gobierno de Aragón. En 2005, además, fue nombrado Hijo Predilecto de Andorra. Es miembro correspondiente de la Academia Argentina de Ciencias Morales y Políticas y, desde 2001, también de la Real Academia de la Historia de Madrid;?catedrático emérito de Filosofía de la Universidad de Salamnca y de Literatura española en el Brooklin College.

Inconformista

A pesar de su vida ligada al sacerdocio hasta 1962 y al estudio, o quizá precisamente por eso, su carácter ha estado siempre caracterizado por un espíritu inconformista, rebelde y de búsqueda de respuestas satisfactorias. Ese espíritu fue el que, entre otras cosas, le llevó a no dar nunca por terminada por completo una investigación, a abandonar el sacerdocio realizando una profunda reflexión y crítica sobre la Iglesia Católica, o renunciar al cargo de presidente de PP en Estados Unidos: "Me interesó como medio de promover mayor bienestar para los españoles residentes en ese país, por ejemplo, obteniendo la doble nacionalidad. (...) Me desilusioné cuando no percibí apenas otro interérs que el voto, por lo cual, y ante la total falta de apoyo en un proyecto de construcción gratuita de un edificio que habría procurado inmensas ventajas sin gasto alguno estatal, renuncié", explicaba el propio Ángel Alcalá en una entrevista concedida a la Revista Crisis (Erial Ediciones) en mayo del pasado año.

Una fuente inagotable de curiosidad y de capacidad de investigación

El andorrano Ángel Alcalá es considerado uno de los mayores expertos en la historia de las ideas religiosas, de los heterodoxos, de la Inquisición y de la figura de Miguel Servet, personaje sobre el que, además de haber escrito los ensayos más reputados de cuantos existen, se considera admirador e "hijo espiritual, como apostol y mártir de la tolerancia", como explicó en una excelente y deliciosa entrevista publicada en el número 7 de la Revista Crisis, de mayo de 2015, en la que habla largo y tendido sobre su extensa y apasionante trayectoria vital desde sus recuerdos de la guerra civil a la actualidad.

Destacado estudioso de la literatura religiosa del siglo XVI, es autor de una veintena de libros y de más de cincuenta la cifra exacta es difícil de cuantificar de artículos sobre literatura, música, Inquisición o historia española entre los siglos XVI y XX, que se han divulgado a través de revistas como Turia, Sender y su tiempo, Revista de Occidente, Cuadernos Hispanoamericanos, Boletín de la biblioteca Menéndez pelayo, Anatomía del Humanismo, Boletín de la Academia de Ciencias Morales y Políticas y Revista de Andorra, publicada por el Celan.

El pasado año publicó su primera obra de ficción, la novela histórica La infanta y el Cardenal (La Esfera de los Libros), que relata la historia del matrimonio morganático de Luis de Borbón, hermano de Carlos IV y sucesor al trono designado por Carlos III, y María Teresa de Villábriga, que significó el fin de las aspiraciones al trono de Luis en favor de su hermano Carlos cambiando significativamente el destino de España. Antes de La infanta y el Cardenal Alcalá dio salida a su pasión por la música con Música, pintura, poesía: Poemas a la música y a los músicos en la literatura europea (Sial Contrapunto).

Entre sus proyectos futuros, Ángel Alcalá explicó a DIARIO DE TERUEL en febrero de 2015 que había regresado "a mis viejos y obsesivos temas: la filosofía de la religión, el origen, sentido y desarrollo de las religiones y la relación entre las tres religiones monoteístas, el retardo evolutivo del islamismo y el laicismo y el agnosticismo en la evolución y la actualidad de la historia". De esa entrevista hace año y medio, y con una envidiable capacidad de trabajo aseguraba: "Toda mi vida ha sido de estudio, menos activa de lo que habría querido, pero a los 86 años y medio aún queda tiempo para todo".

Autor:Miguel Ángel Artigas Gracia Teruel