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Tronchón vuelve a tener escuela aunque con pupitres y mapamundis del siglo XIX

Numeroso público asistió a la inauguración de la antigua escuela de Tronchón, que tuvo lugar el pasado viernes por la tarde

Tronchón vuelve a tener escuela. Aunque actualmente los niños de Tronchón van a la escuela de Cantavieja, el Ayuntamiento ha recuperado para el patrimonio municipal la antigua escuela de la localidad, cuyo mobiliario y útiles propios entre los que hay mapamundis y pupitres del siglo XIX se encontraban en diversas dependencias municipales.

Tronchón vuelve a tener escuela. Aunque actualmente los niños de Tronchón van a la escuela de Cantavieja, el Ayuntamiento ha recuperado para el patrimonio municipal la antigua escuela de la localidad, cuyo mobiliario y útiles propios entre los que hay mapamundis y pupitres del siglo XIX se encontraban en diversas dependencias municipales.

Todo el trabajo ha sido posible gracias a la colaboración de los ayuntamientos implicados con la iniciativa y colaboración de la Comarca del Maestrazgo dentro de un proyecto que se inició el año pasado coordinado por Estefanía Monforte, asesora del CIFE Ángel Sanz Briz en Teruel.

La inauguración de la escuela contó con la participación del alcalde de Tronchón, Roberto Rabaza, la técnico de patrimonio de la Comarca, Sofía Sánchez y la propia Estefanía Monforte, que explicó brevemente la historia de la escuela de Tronchón y todos los materiales que de ella se conservan, que no son pocos.

Monforte comentó que entre el mobiliario destacan cuatro pupitres que datan del 1892. Son mesa-bancos de dos plazas con tablero inclinado, un hueco para tintero y dos cajones para libros. El banco es corrido y con respaldo. En cuanto a la mesa del profesor y sus herramientas, se hallan varios instrumentos interesantes como son el timbre, los botes de tinta y una escribanía de los años 40.

En lo que al material didáctico se refiere, se conservan los cubos de medidas de capacidad de madera en un buen estado, y los pesos, pero los grandes tesoros didácticos de esta aula son las cajas de minerales y la colección de mapas. Las cajas de minerales datan de los años 20; Lluís Soler Pujol, su autor, fue fundador del Museo Pedagógico de Ciencias Naturales y desde 1900 a 1950 se encargó de crear materiales didácticos y divulgativos. La colección de cuatro mapas, cada uno de ellos de una parte del planisferio, destaca por su antigüedad, ya que están datados en los años 1894-1895. También hay otros objetos como los armarios, la estufa, el reloj o el crucifijo.

Además Estefanía Monforte explicó como era el funcionamiento de las escuelas, ya que se han encontrado en el archivo municipal el Reglamento provisional de las Escuelas públicas de instrucción primaria elemental escrito en Madrid a 26 de Noviembre de 1838; las Instrucciones de antropología y pedagogía arregladas a la legislación vigente en España, a las costumbres y al carácter de sus moradores, para las Juntas de primera enseñanza, datadas en 1845; actas de toma de posesión de maestros que datan de 1904 y son firmadas por los miembros de la Junta Local de Primera enseñanza, compuesta por el alcalde, dos padres de alumnos, el cura y un concejal, y en los que se plasma cual sería la dotación anual para este maestro y remarcan sus cualidades académicas.

Manuel Ayora, el maestro

También se nombró en la presentación a Manuel Ayora Piquer, un maestro nacido en Tronchón en 1910 que fue un entusiasta de la educación para su época. Estudió magisterio en la Escuela Normal de Teruel y sus primeros destinos fueron El Grado (Huesca), La Mata de Olmos, Torre de Compte y Valdealgorfa. Manuel escribía a menudo artículos sobre pedagogía que publicaba en revistas como Faro y República. Tras conseguir plaza en Tronchón, estalló la Guerra Civil y tuvo que huir hacia Francia. Al terminar la guerra retornó a España y se jubiló en el Colegio Nacional Pere Vila de Barcelona en 1978.

La recreación de la escuela antigua de Tronchón se ha realizado en un local municipal donde actualmente está también el consultorio médico. Antiguamente ya hubo escuela allí aunque luego se trasladó a la plaza del Trinquete, donde hubo un cartel metálico hasta hace muy poco que hoy forma parte también de la colección de la escuela. En él se puede leer "Dn. (.....) y Dn. José Royo Escorihuela por la construcción de los presentes locales escuela, que mejoran la enseñanza de esta villa. Los vecinos de Tronchón en gratitud y agradecimiento".

La inauguración fue en el día de inicio de las fiestas del Tremedal y a ella asistieron numerosos vecinos con ganas de conocer el nuevo espacio, muchos de los cuales habían sido alumnos de la misma, como Martín Ayora, que utilizó aquellos pupitres a finales de los 40.

Tanto Roberto Rabaza, como Sofía Sánchez y Estefanía Monforte insistieron en la posibilidad de que se acrecentara la colección por medio de la cesión y algunos de los asistentes, al finalizar la presentación, fueron a sus casas y aportaron ya los primeros objetos: una cartera de colegio de cartón y unos diplomas de estudios.

Martín Ayora fue alumno de la escuela entre 1948 y 1953. "Guardo muy buenos recuerdos de la escuela, todo lo que sé, lo sé de entonces, porque después no he aprendido nada ya. De los maestros no me acuerdo mucho, de uno que venía de Mirambel, que por cierto, daba mucha leña, pero enseñaba también mucho, y luego vino uno de Horta de San Joan, de Tarragona".

Red de escuelas antiguas

No ha sido la única en recuperarse en el Maestrazgo. Concretamente las escuelas de la partida masovera de San Juan del Barranco en Cantavieja y la de la vecina localidad de Mosqueruela han sido recientemente puestas en valor. Próximamente se abrirán las de Cañada de Benatanduz y La Cuba para deleite de vecinos y curiosos. Villarluengo ya contaba con una rehabilitada desde hace años y la del Convento de las Monjas Agustinas en Mirambel se ha recuperado este año a la par que el convento. Todas ellas se intentará que pasen a formar parte de una ruta de escuelas rurales.

Sin duda es una buena noticia que los ayuntamientos recuperen estos espacios. En palabras de Sofía Sánchez, "lo que estamos intentando es promover una ruta que integre las escuelas que hay y mejore constantemente. Es un proyecto a largo plazo, ya que se sigue investigando y localizando piezas en las que ya existen y en las que se van creando"

Autor:Cristina Mallén Tronchón