“Que la gente no pueda cobrar por hacer un cortometraje es muy triste”
Con un Premio Simón al Mejor Cortometraje de Cine Aragonés por el trabajo Milkshake Express en el zurrón, el joven realizador y guionista de Valdealgorfa Miguel Casanova sigue constante en la redacción de guiones y sueña con rodar su primer largometraje. No busca fama ni lujos, sino poder trabajar cobrando en lo que le gusta. Algo cada día más difícil en el sector debido a la falta de apoyos.
- ¿Qué tal está funcionando Milkshake Express?
- Lo cierto es que en un principio pensábamos que iba a funcionar mejor. En Aragón, al menos, se ha oído hablar de él, que al fin y al cabo es lo más importante; más que ganar premios. En Aragón nos hicimos notar, pero fuera no ha ido tan bien como esperábamos. Lo achaco a que todo el tema de la corrupción política (temática central del trabajo) tuvo su auge un pelín antes de que hiciéramos el corto y el enfado de la gente se ha convertido en cansancio. Estamos muy contentos con el Premio Simón que nos dieron en Aragón.
- ¿Se lo esperaba?
- Fue una sorpresa enorme porque es lo típico que siempre crees que le pasa a otro. Competíamos con compañeros nominados con cortometrajes muy buenos
- ¿El éxito inicial de este cortometraje le abrió puertas?
- Puertas no me ha abierto ninguna. Tampoco lo esperaba, ya que a fin de cuentas un premio, a no ser que sea muy grande, no te abre ninguna puerta. Tampoco deben estar para eso. Hay que seguir luchando al pie del cañón. He estado un poco fuera de Aragón desde que gané el premio y ahora quiero volver en octubre a grabar algo, a ver si sale adelante.
- ¿De qué se trata?
- Quiero rodar un corto mucho más pequeño. Si todo va bien, será en octubre en Zaragoza. Y acabo de terminar de escribir una película para el máster que he cursado en la Universidad Carlos III de Madrid. Mi objetivo es, a partir de septiembre, mover el largo. Tengo que reescribirlo aún, así que de momento mis objetivos están centrados en rodar en octubre. Cada vez es más complicado levantar un rodaje.
- ¿Ese largo irá sobre el 15M?
- No es que vaya sobre el 15M, sino que está enmarcado en el momento en que estalla el 15M, por lo que sí es cierto que tiene una carga política importante
- ¿Dónde le gustaría rodarlo?
- Está pensado para rodarlo en Zaragoza. Ojalá. Primero porque es mi ciudad, es lo que conozco y donde yo me siento cómodo rodando. Y segundo, porque Madrid y Barcelona son ciudades que ya se han visto mucho. Ahora Miguel Ángel Lamata ha rodado Nuestros Amantes por todo Zaragoza, Huesca y Teruel. Una postal tremenda. Se ha visto poco Zaragoza en el cine y sería una oportunidad preciosa
- ¿Por qué es tan difícil rodar una película?
- Básicamente porque cada vez hay menos apoyo económico e institucional, lo cual es una pena. La cultura no debería ser un lujo y desgraciadamente lo es. Afortunadamente hay mucha gente que hace esto por amor al arte, pero ese no es el remedio. Que la gente no pueda cobrar por un corto es muy triste. Ojalá esto cambie algún día
- ¿Se considera un profesional del gremio?
- Para nada. Yo rodé Milkshake Express con un equipo de entre 40 y 50 personas, y todos tenían mucha más profesionalidad que yo. Nunca se llega a saber todo. Lo que sí intento es trabajar con la mayor profesionalidad posible y estoy más o menos consiguiendo vivir de ello.
- También hace sus pinitos en la docencia, con cursos para niños, y esta semana imparte un taller de guión dentro del proyecto cultural Plot Point de Valdealgorfa.
- Muchos directores hoy en día consagrados dicen que no tuvieron la oportunidad de aprender porque no existía el gremio como tal. Afortunadamente, he tenido una formación cinematográfica muy amplia en muchos sitios con profesionales a los que admiro un montón y ahora, de una forma mucho más modesta, me resulta grato poder transmitir a los chavales algunos conocimientos.
- ¿Cómo surge el proyecto de hacer de Valdealgorfa un pueblo de cine?
- Fue una propuesta que me hizo Santi Sáenz, que siempre está moviendo la cultura sin intentar sacar nada a cambio. Cuando el año pasado me propuso presentar Mikshake Express hablamos de extenderlo, que fuera un acto anual en el que pudiésemos proyectar diferentes cortos con el fin de poder crear un festival
- Asistimos a un auge del cine aragonés liderado por Paula Ortiz (La Novia) o Miguel Ángel Lamata (Nuestros amantes).
- La mejor noticia es que parece que cada año va a más. Paula se veía venir que iba a acabar jugando en otra liga por su talento desmesurado. Luego están Miguel Ángel Lamata o gente que acaba de hacer su primera película, como Alejandro Cortés (Refugios), o Pablo Aragüés (Novatos), que ya lleva varias. Pinta muy bien. Aragón siempre ha sido una tierra de cine y se nos ha tenido un poco olvidados. Ahora es momento de retomar nuestro nombre en la historia del cine español
- ¿Qué papel juegan las instituciones en todo esto?
- En Aragón no puedo tener muchas quejas porque con Milkshake Express se portaron muy bien, sobretodo la Diputación de Zaragoza. El tema no es tanto el económico -que es básico- sino ver que la gente que hace cine en Aragón no se quiere ir fuera. A fin de cuentas, están haciendo una labor tremenda por la imagen y el turismo de la tierra.
- ¿Cuidamos a los referentes? Últimamente ha habido cambios en el Centro Buñuel Calanda, a priori para reforzar la imagen del cineasta universal.
- He estado todo el año en Madrid y no tenía ni idea de lo que ha pasado. Si no se cuida, debería cuidarse el referente de Buñuel. No estoy al tanto de la polémica del CBC, pero olvidar de dónde venimos y quiénes somos sería un error.
- ¿Cuál es su sueño?
- Única y exclusivamente poder vivir de esto. No pido nada más. Por supuesto, me gustaría hacer como director La noche gira, que es la película que estoy escribiendo. Sí es cierto que estoy enfocando mi carrera mucho más hacia guionista. Yo no quiero renombre, creo sinceramente que no sirve para nada. Si yo puedo vivir de esto para siempre y sin ningún tipo de lujo, cumpliré mi sueño. En ello estoy.
Autor:Marcos Navarro / Alcañiz